La pirámide de Maslow y las necesidades que satisfacen las startups

La tecnología y las startups ya han cubierto tantos nichos que permiten llenar desde nuestras necesidades de alimento u hogar hasta la búsqueda de la autorrealización.

En 1943 Abraham Maslow elaboraba una teoría psicológica sobre la jerarquía de las necesidades humanas que se plasmaba en su famosa pirámide, la cual iría ampliando a posteriori. Según su hipótesis, hay cinco niveles posibles y los seres humanos requieren tener cubiertas sus necesidades fisiológicas básicas para poder escalar y desarrollar otros deseos más espirituales.

La firma de análisis CB Insights ha querido demostrar que la tecnología y las startups han evolucionado y se han segmentado tanto que son perfectamente capaces de cumplir con estos requerimientos, desde los más fundamentales a los más frívolos.

Nivel 1- Aquí tenemos las necesidades fisiológicas, como pueden ser la alimentación o el descanso. En este escalafón la consultora menciona a las numerosas empresas de entrega de comida a domicilio como Instacart, Bento o Blue Apron, pero también a startups relacionadas con el alojamiento, como Airbnb. Las hay temporales o más a largo plazo.

Nivel 2- En esta era digital la protección de nuestros datos personales es casi tan importante como la protección a nuestra propia persona. Aquí se sitúan startups de seguridad que pretenden salvaguardarlos y crear barreras para ahuyentar a los atacantes, como Avast, Lookout o Veracode.

Nivel 3- Este nivel está dedicado al amor y la pertenencia. Con las numerosas apps que hay en el mercado, conocer gente y encontrar el amor nunca había sido tan sencillo. Solo hay que darse un garbeo por Tinder, Happn o Badoo.

Nivel 4- La autoestima y la reputación están en el penúltimo escalón de la pirámide de Maslow. En esta altura se sitúan todas esas herramientas que permiten mostrar logros como Foursquare o Strava y también esas que miden nuestra ‘meritocracia’, como Traity.

Nivel 5- En la cúspide se encuentra la autorrealización. Allí arriba hay startups que nos tratan de ayudar a alcanzar nuestro máximo potencial con consejos de coaching, software para mejorar la productividad y entrenamiento cerebral.

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