Philips vuelve a beneficios pisando sobre seguro
La compañía holandesa está viendo los frutos de la reconversión puesta en marcha en 2011.
Cuando el negocio de televisión de Philips perdió la batalla contra los competidores que ofrecían productos más baratos y los beneficios comenzaron su caída libre, la compañía se puso manos a la obra con su nueva estrategia.
La transición ha estado liderada sustancialmente por su CEO Frans van Houten, quien ha repasado los puntos clave de la travesía iniciada en 2011 en una entrevista concedida a Reuters.
La reconversión iniciada tenía diversos pilares: el ahorro de costes (con la venta de divisiones deficitarias, como la de TV vendida en abril de 2012), reducción de plantilla, fomento de la cultura corporativa y la apuesta por negocios rentables.
La división de consumo de Philips se centra ahora en productos que demandan los consumidores y los empleados reciben retribuciones en función de su rendimiento.
Sus medidores de contaminación atmosférica gozan de gran éxito en China, en Alemania plantan cara a las máquinas de afeitar y cepillos de dientes electrónicos de Braun y la máquina para hacer leche de soja que arrasa en China se ha reconvertido en máquina de hacer sopa para el mercado francés.
Asia es sin duda su mercado fetiche. Las ventas en la región durante el tercer trimestre fiscal se han disparado un 15%.
Pero la unidad más productiva de Philips es la dedicada al equipamiento médico. Durante el último ejercicio trimestral la división ha aportado el 40% de los ingresos y el 60% de los beneficios operativos. La compañía espera además que su crecimiento se acelere para el 4Q.