Pase de diapositivas con Windows Movie Maker

Una de las principales características de Windows Movie Maker es su extrema facilidad de uso. Sus limitadas opciones, más que suficientes para editar vídeos y convertirlos en producciones divertidas y variadas son las que facilitan el manejo del programa, junto con una estructura paso a paso y apartado titulado “Consejos para la creación de películas”.

El interfaz está dividido en tres partes. En la parte superior derecha está la pantalla donde previsualizamos nuestro proyecto en cualquier momento.

A su izquierda veremos todo el material del que disponemos para trabajar; este espacio a su vez puede también puede mostrar las ‘Tareas’, que no es nada más que una especie de asistente con enlaces directos a las tareas necesarias, y por orden, que el usuario tendrá que realizar para hacer su proyecto. Está dividido en cuatro apartados: 1. Capturar vídeo; 2. Editar película; 3. Finalizar película y Consejos para la creación de películas, cada uno de ellos con otros apartados como ‘importar vídeo’, ‘importar imágenes’, ‘ver efectos de vídeo’ o ‘Enviar por correo electrónico’, una de las opciones de finalización de película. A estas tareas se accede a través de un icono situado en la parte superior.

En el apartado de Colecciones, que es el espacio donde se recoge todo el material del que disponemos, se ofrecen tres opciones: ‘Efectos de vídeo’ que queremos aplicar, ‘Transiciones de vídeo’ y ‘Colección’, donde se recogen los vídeos, imágenes y música.

Sobre el Interfaz comentar también que en la parte inferior está el guión de la película, con todos los vídeos, transiciones, imágenes, música, etc. que hayas decidido incorporar y que podrá visualizar en modo ‘Línea de tiempo’ o en modo ‘Guión gráfico’. El cambio entre un modo y otro se realiza en un icono que se encuentra situado encima de la línea de tiempo.

Para empezar con nuestro proyecto de Pases de diapositivas lo primero que haremos sera importar todas las fotografías con las que queramos trabajar. Para ello nada más fácil que abrir el espacio de tareas y seleccionar, en el primer paso, ‘Importar imágenes’, momento en el que se desplegará una ventana en la que el usuario tendrá que buscar las fotografías que quiera utilizar, seleccionarlas y pinchar sobre ‘Importar’.

Una vez que se tengan las fotografías, a las que se pueden añadir nuevas en cualquier momento, tendrás que colocarlas en la línea de tiempo en el orden que quieras que aparezca. Para ello seleccionala y arrástrala.

Por defecto la duración de cada fotografía en el pase de diapositivas es de cinco segundos. Si quisieras que durara menos sólo tienes que ir a Herramientas > Opciones > Opciones Avanzadas y cambiar los tiempos tanto de la imagen como de la transición. Aprovecha también para realizar otro ajuste importante, la relación de aspecto, y opta por 16:9 si el televisor en el que vas a disfrutar del pase de diapositivas es panorámico. Al final también podrás hacer algún ajuste en cuanto al tamaño máximo que tendría que tener un proyecto que quisieras enviarlo por correo electrónico, una de las opciones a la hora de finalizar la película.

En Herramientas también te encontrarás con una opción más que interesante, que simplifica al máximo la creación de películas o pase de diapositivas. Denominado ‘Automovie’ lo que hace es ofrecer una serie de plantillas y hacer el pase de diapositivas automáticamente con el contenido que haya en tu Colección, poniendo una serie de transiciones aleatorias. Sobre este proyecto automático podrás realizar los cambios que quieras y si se trata de hacer pases de fotografías, donde no hay que escoger el mejor momento es una opción perfecta.

Después de arrastrar las imágenes escoge la música que más te guste y arrástrala también a la línea de tiempo. Hay programas, más avanzados y de pago, que cuentan con la opción de ajustar la duración del pase de diapositivas con la duración de la música para que todo acabe al mismo tiempo, pero no ocurre lo mismo con Windows Movie Maker. Por lo tanto , quizá lo mejor fuera optar por música instrumental, donde se notan menos los cortes.

Junto con la música, también es el momento de optar por las transiciones. Existe muchísimas y puede acceder a ellas en Colecciones > Transiciones de vídeo. Al igual que las fotografías o la música, simplemente tendrás que seleccionar la que más te guste y arrastrarla hasta la línea de tiempo.

La finalización de la película tiene dos partes: en primer lugar los créditos y títulos y en segundo lugar lo que es la creación del pase de películas en sí.

Para la creación de títulos y créditos en Windows Movie Maker se puede acceder bien a Herramientas > Títulos y créditos, tras lo cual aparecerán diferentes opciones como ‘Añadir título al principio de la película’, ‘Añadir título en el clip seleccionado en el guión gráfico’ o ‘Añadir créditos al final de la película’. Una vez seleccionada cualquiera de las opciones aparecer un cuadro en el que se tiene que escribir el texto deseado.

El siguiente paso será poner el título tal cual lo hayamos escrito o acceder a Más opciones: ‘Cambiar la animación de título’ o ‘Cambiar la fuente y el color del texto’. El el primer caso existen infinidad de opciones (hasta 50) cuando se trata de texto en una línea, pero también existen muchas opciones si son títulos de dos líneas o créditos. Cada una de las opciones que escojas se verá previsualizada en la pantalla de la derecha.

Una vez puestos todos los créditos es hora de acabar con nuestro proyecto, en el que habremos convertido nuestras mejores fotografías en un vídeo del que podremos disfrutar tanto en un ordenador como en el televisor de casa. Para ello tenemos varias opciones, desde ‘Guardar en el equipo’, ‘Guardar en CD’, ‘Enviar por correo electrónico’ o ‘Enviar al web’. Windows Movie Maker se encargará de buscar los mejores ajustes de calidad/tamaño para cada opción sin que el usuario, una vez más, se tenga que preocupar.