La otra agenda de ZP
Inaugurar una feria no supone cortar únicamente una cinta: el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha tenido que someterse al peso de la anécdota. Testar un futurista visor, participar en una eclase o dejar que le tomen el pulso con un aparato de última generación son también las obligaciones del presidente.
La otra agenda de ZP está repleta de lo que se podría llamar noticias de color: nada de datos económicos, nada de reuniones bilaterales. Después de asegurar que el sector inmobiliario no tuvo tanto que ver con la crisis como se cree (una de sus declaraciones de la inauguración, recogida en los principales medios del país) o vender que España está muy bien posicionada en tecnología (a la par de Alemania, según el presidente), Zapatero se ha lanzado a recorrer los pabellones de la feria.
Zapatero y Merkel se han probado unas gafas para 3D y unos visores especialmente punteros de SAP. También han testado mesas táctiles y otros gadgets.
Esta mañana los dos presidentes han podido incluso volver a la infancia, participando en una clase a distancia organizada por Microsoft.
Los alumnos del colegio Internacional SEK-Ciudalcampo de Madrid y los del Hausburgschule Staatliche Europa-Schule de Berlín se han dado cita: los primeros en su escuela, los segundos en el aula interactiva de Microsoft en Hannover.
Acompañados por Zapatero y Merkel los segundos recorrieron Madrid en la aplicación de mapas de Bing, mientras los estudiantes españoles les decían la ruta a recorrer.
Los dos presidentes hicieron además una pausa especial en el pabellón de España, donde visitaron cuatro stands de forma individualizada. Entre ellos, el de Oesía.
En él protagonizaron una de las fotos divertidas de la jornada, testando de primera mano las herramientas de teleasistencia y mostrando sus pulsaciones por minuto o la saturación de oxígeno en sangre. Según comenta la propia Oesía, tanto Zapatero como Merkel entraron dentro de los parámetros normales. El presidente español confesó que había hecho footing aquella misma mañana.
Nunca se sabe para que hay que prepararse…