Es posible que recibas decenas o cientos de correos al día, de los cuales previsiblemente tengas se acaben borrando la mayoría. Para clasificar a aquellos “elegidos” que vayan a permanecer en la bandeja de entrada una forma muy sencilla pero eficiente es ponerles color. Si empleamos Microsoft Outlook habitualmente hay que saber que el programa de gestión de correo nos permite establecer un código cromático a los mensajes, dependiendo de su remitente. Así podemos establecer múltiples parámetros ordenatorios: Familia-trabajo, urgentes-no urgentes, pendientes de contestar-contestados, etc. Para comenzar a usar este amalgama de tonos es necesario seguir unos pasos:
– Seleccionamos la carpeta de Outlook a la se aplicará la regla.
– Hacer click sobre el menú Herramientas Organizar.
– En la nueva sección muestra Outlook, hay que seleccionar la opción Mediante colores.
– Lo siguiente es seleccionar un correo de alguno de los contactos a los que vas a aplicar una regla de color. Tendrás que elegir el color que deseas del menú desplegable.
– Para acabar, haz click en Aplicar color. Así tenemos asignado un color a cada contacto. Es posible seguir repitiendo el mismo proceso con otros contactos, hasta un máximo de 30 por carpeta.
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