La división española de Orange tira de los resultados de la teleco francesa

Orange ha dado a conocer los resultados correspondientes a su tercer trimestre fiscal, un período en el que la compañía gala ha experimentado un aumento de sus ingresos y ganancias conducido por el buen desempeño en España y África.

De julio a septiembre la compañía naranja ha obtenido una facturación de 10.320 millones de euros, lo que supone una mejora del 0,8% en términos interanuales.

España habría tirado del carro durante este Q3 para su negocio en Europa. La filial española de Orange ha elevado sus ingresos en un 7,8% respecto al mismo intervalo de 2015, alcanzando la cifra de 1.290 millones de euros. Asimismo, ha facturación de servicios móviles ha crecido un 9,8% debido a la fuerte demanda de 4G y ha habido un 5,4% más de contratos de clientes.

La teleco francesa también tiene mucho que agradecerle a su división de África y Oriente Medio. Sus ventas han escalado un 2,5% interanual hasta los 1.370 millones de euros. El aumento del 34% en ingresos por datos móviles habría compensado con creces el impacto negativo que los requisitos de registro habrían producido en algunos territorios de la región.

“La creciente adopción de smartphones y nuestra estrategia comercial se ha traducido en un fuerte incremento de los ingresos de datos móviles (en África y Oriente Medio). La integración de las operaciones adquiridas en Sierra Leona, Burkina Faso, Liberia y la República Democrática del Congo está en camino, con las dos últimas operaciones ahora consolidadas”, ha comentado en un comunicado el CEO de Orange, Stéphane Richard.

Las cosas no le han ido tan bien a la telco jugando en casa. Las operaciones francesas de la firma se han visto obstaculizadas por la reducción de las tasas de itinerancia nacional e internacional. La caída local ha sido del 0,6% interanual a 4.770 millones de euros, influida por una caída del 3,8% en las ventas de servicio móvil.