"One More Thing", la película
Steve Jobs ha presentado el evento en tres actos:
Acto 1 – Un nuevo iMac, más fino que el anterior (aunque tampoco mucho más) con una cámara digital integrada, según Jobs mejor que la iSight. Lleva un nuevo programa llamado Photobooth (en la imagen), un fotomatón en software con efectos horterillas especiales. Lo mejor, el mando a distancia con sólo seis botones para controlar un nuevo software especial llamado Front Row (primera línea).
Front Row te da acceso a todo el material visual y sonoro que hay en el Mac con un interfaz extremadamente sencillo: cuatro iconos (música, fotografías, vídeos y DVD) flotando en un círculo sobre un suelo 3D virtual. Manejarlo es como usar el iPod, navegas por una estructura de menús jerárquicos en columnas que te van llevando de un sitio a otro. Como el iPod, no navegas por la estructura de carpetas y ficheros de tu disco duro, sino que Front Row lo presenta todo de forma coherente (los de Apple han encontrado la gallina de los huevos de oro y no la sueltan): las playlists de tu iTunes, los artistas y sus álbumes, los álbumes de iPhoto, las películas, trailers, vídeos musicales, DVD… usarlo es una auténtica gozada y, la comparación con los Windows Media Center, imposible. Sencillamente, no hay color. El mando, diminuto y con sólo seis botones (incluyendo una mini-rueda, como el iPod de nuevo es más bien como un iPod Shuffle), es todo lo que necesitas para manejar este “media center” que es el nuevo iMac. Actualización: el mando sólo está disponible con el. Nuevo iMac, pero es compatible con la cuna del iPod. Va por infrarrojos, no por Bluetooth, precisamente por ese motivo.
Acto 2 – Un nuevo iPod. Mucho más fino que el antiguo modelo de 20 GBytes. En color blanco y en negro, con pantalla en color de 320×240 de 2,5 pulgadas. Y sí, soporta vídeo, incluyendo el codec H.264. El nuevo iPod es como el iPod nano, sin las esquinas frontales redondeadas en tres dimensiones (sólo frontalmente) pero con una superficie más grande y algo más gordito, claro.
Pero aunque no sea el nano, incluso el modelo de 60 GBytes resulta pequeño y ligero. Eso por sí mismo, sin comparar con el antiguo de 20 Gbytes, que ya era pequeño. De cerca es una auténtica gozada y se siente bien en la mano y en el bolsillo. El acabado, perfecto. Yo ya le tengo echado el ojo a uno y en cuanto se descuiden, me da en la nariz que les va a desaparecer. Llamadlo “robo” si queréis. Yo le llamaré “préstamo a largo plazo”.
Para vosotros, el iPod de 30 Gbytes costará 319 euros (IVA incluido) y el de 60 Gbytes, con capacidad para hasta 15.000 canciones, 25.000 fotos o 150 horas de vídeo, 429 euros (también con IVA). Actualización: después de estar jugando más con él, está claro que se van a hinchar a venderlo estas fiestas. Es un auténtico objeto de deseo, como el nano.
Una cosa, parece que Apple ha hecho las paces con Eminem. Antes estaban a la gresca, en plan: “Apple, tronks, no me mola nada que te hayas pillado mi tema por la patilla para promocionar tu iPod full de Estambul, hermano” y Apple, “Eminem, no me calientes, que te meto” y el otro “eso no se lo dices a mis abogados y además te voy a pinchar las ruedas del coche”, pero ahora el DJ Steve y el Slim Shady están a partir un piñón. O por lo menos eso se deduce del último anuncio del iPod, con Lose Yourself.
Acto 3 – iTunes 6. Estos tíos de Cupertino no paran. Nuevo programa y nueva versión de la tienda online, con tres grandes novedades: por fin se podrán regalar álbumes y canciones específicas, no un “vale por lo que tú quieras” que la verdad es algo de lo más impersonal. No, ahora por fin tus amigos y familiares podrán sufrir disfrutar tu gusto musical por la cara. Le podrías haber comprado uno de esos “vale por”, pero no, en el fondo de tu corazón sabes que van a adorar esa compilación edición especial de temas clásicos de Torrebruno. La segunda novedad: vídeos musicales a la venta y cortos de Pixar. La tercera novedad son las series de televisión de ABC y Disney Channel, entre las que se encuentran “Mujeres desesperadas”. El CEO de Disney Rogert Iger estuvo en el escenario y dijo algo así como: “qué pasada, ¿eh?” Bueno, Mickey Mouse, pues sí y no. En españa no tendremos equivalente, aunque quizás con el tiempo podremos ver “Los Serrano” o “Cuéntame lo que pasó” en el iPod. O casi que mejor no. En fin, estos vídeos se distribuyen en 320 x 240, algo que va genial para el iPod, pero que se me queda corto para el nuevo iMac G5, la verdad. Se ve bien escalado, la nitidez del codec H.264 es obvia, pero no tiene nada que ver, no ya con la alta resolución disponible en algunos de los trailers de la página de Quicktime, sino con películas DVD estándar. Por cierto, que están protegidos por Fairplay y no se pueden quemar ni en CD ni en DVD, aunque con esa resolución, ni falta que hace. Actualización: todo el tema de vídeo está por ahora limitado a los Estados Unidos. Luego vendrá Reino Unido, Alemania y Francia.
En definitiva, un evento cargado de novedades, con el nuevo iPod e iMac como estrellas (por lo menos para la audiencia no norteamericana) y que apunta claramente a lo que ya se barruntaba todo el mundo desde hace tiempo: Apple se inclina cada vez más a la electrónica de consumo y el ocio digital. Pero en vez de hacerlo como todo el mundo, sacando pantallas de plasma clónicas y productos sin diferenciación, están capitalizando su capacidad de innovación y el éxito del iPod para hacer algo diferente (y visto lo visto, y tocado lo tocado, bastante mejor que el resto). El año que viene por estas fechas no me extrañaría ver películas de los grandes estudios y en alta resolución disponibles en la iTunes (Music) Store.
Pero hasta que llegue ese momento todavía falta. Ahora, de nuevo, canapeteo que te crió, que ando canino. Hasta ahora.
Actualización: ni hasta ahora, ni nada. Demasiadas margaritas. En cuanto tenga ADSL, resumiré la emisión. Pemanezcan atentos a sus pantallas.