Objetivo IBM: Multiplicar por 100 el tiempo de ejecución de sus ordenadores cuánticos este mismo año

Para años posteriores se propone entregar circuitos dinámicos capaces de medir el estado de los qubits sin que se descodifiquen e integrar máquinas cuánticas y clásicas.

IBM lleva tiempo implicada en la carrera por democratizar el uso de la computación cuántica, para resolver problemas que ahora, con la tecnología disponible en el mercado, no es posible.

Su objetivo es implementar en la nube una computadora cuántica full-stack que cualquiera sea capaz de programar.

A finales de 2020, el Gigante Azul introdujo el procesador IBM Quantum Hummingbird de 65 qubits para los miembros de IBM Q Network. Y poco después completaba su hoja de ruta para ir escalando hacia sistemas más grandes.

La hoja de ruta de IBM

La compañía quiere terminar dando forma a dispositivos de más de 1 millón de qubits. Aunque eso será con el tiempo.

De momento, este año está previsto el lanzamiento del procesador IBM Quantum Eagle de 127 qubits. En 2022 llegará el sistema IBM Quantum Osprey de 433 qubits. Y en 2023 debutará el IBM Quantum Condor de 1121 qubits.

Desde IBM explican que “estamos bien encaminados para alcanzar esos objetivos”.

Para no salirse del plan trazado, acaba de mostrar el software que utilizará para acelerar ordenadores cuánticos realistas, al alcance de los desarrolladores y no sólo de doctores en física.

El trabajo en esta parcela permitirá multiplicar por 100 la velocidad de las aplicaciones cuánticas este mismo año. Es decir, tareas que antes llevaban días se acabarán completando en cuestión de horas.

La hoja de ruta se completará con circuitos dinámicos capaces de medir el estado de los qubits sin que se descodifiquen, algo que se harán realidad en 2022, y bibliotecas de circuitos prediseñados e integración ordenadores cuánticos y clásicos con un hardware especial, entre el año 2023 y 2024.

Si los planes de IBM se cumplen, todas estas innovaciones permitirán revolucionar campos como el descubrimiento de materiales o el desarrollo de fármacos.

Imagen destacada – Crédito: Connie Zhou para IBM