La fiebre de los coches autónomos está llegando a una gran variedad de marcas de automóviles, que están apostando por invertir en su desarrollo.
Tal es el caso de la marca sueca Volvo, que ha unido sus fuerzas con la empresa de procesadores Nvidia, que será la encargada de proveer los ordenadores de sus vehículos sin conductor.
Con el nombre de Drive PX 2, Nvidia ha presentado un nuevo ordenador de alto rendimiento para vehículos sin conductor, con una potencia equivalente a 150 PCs, que destaca por permitir el cálculo de billones de operaciones de “aprendizaje profundo”.
La tecnología de Nvidia se basa en el empleo de Inteligencia Artificial para programar el ordenador de los coches autónomos, y está preparada para identificar múltiples escenarios de conducción por segundo, avanzan en TechEye.
De momento se desconocen las cifras que esperan obtener en la compañía de chips con esa operación, pero lo cierto es que el sector del automóvil es el que más crece para Nvidia.
Girará en torno a tres temáticas: desinformación, contrainteligencia y credenciales expuestas.
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