Nuevos casos de iPhone explosivos en Francia

El diario regional francés La Provence continúa su serie veraniega sobre explosiones del producto estrella de Apple, el iPhone. Tras el caso del joven de Aix-en-Provence al que le estalló al lado de la cara el smartphone de su novia, el diario del sur de Francia desveló que lo mismo le había sucedido a Edouard, un comercial de la cercana Marsella al que el iPhone se le había resquebrajado en plena llamada telefónica.
“El servicio post-venta de la firma me pidió que les enviase una foto. Tras el análisis de sus ingenieros, me respondieron que no podían cambiármelo porque ese tipo de rotura no podía haber sido causada más que por  un golpe”, se lamenta Edouard, que reconoce a La Provence que el smartphone se le cayó al suelo cuatro meses ha y que en el momento del suceso no había recibido ningún golpe.
Además del testimonio de Edouard, el rotativo ha conseguido hacerse con las confesiones bajo anonimato de un vendedor de la también sureña Var. El dependiente de una de las tiendas SFR (Vodafone) se confiesa ante los periodistas del diario regional: los casos de Aix y Marsella no son aislados, dos de sus clientes también vieron como su iPhone se fisuraba… durante y después de una llamada. “La pantalla estaba completamente fisurada, como en las fotos que he visto en su site”, explica el vendedor al diario.
Francia se encuentra sumida en una oleada de explosiones en el parque de iPhones de sus ciudadanos, lo que ha creado un clima de preocupación. La gran pregunta que todos se hacen es la de si estallará el iPhone propio. “¡Es la ley de las series!”, explica el investigador del Centro Nacional de Investigación Científica (CNRS, en sus siglas en francés), Rachid Yazami, al diario Le Monde, tranquilizando sobre las últimas explosiones y recordando que a medida que las baterías se hacen viejas aumentan las posibilidades de explosión. “Los incidentes podrían por tanto aumentar en los próximos años”.
Yazami es especialista en baterías de ion litio, como las que utiliza el smartphone de Apple, lo que le permite asegurar que “no hay un problema específico con el iPhone”, si no que los problemas del aparato son semejantes a los de cualquiera con el mismo tipo de baterías.
Llamamiento a la calma
Mientras Europa ya ha hecho un llamamiento para que Apple aclare la situación, algunos medios galos han empezado a cuestionarse la alarma en algunos de sus análisis sobre la situación. Le Figaro, por ejemplo, denuncia que una mala elección de palabras ha causado más alarma.
El diario parisino puntualiza que ninguno de los iPhones franceses ha llegado a explotar, sino que únicamente han visto como sus pantallas se fisuraban. En la misma línea se sitúa Le Monde, en un artículo de ayer domingo. “El término explosión”, concluye, es inapropiado.