Nuevo presidente de la SGAE: “¿El canon? Tan sólo son unos céntimos miserables”
En la versión digital de El País han realizado una entrevista a este señor, que sustituye a Ana Diosdado en el cargo, aunque como él bien admite la “acción de la SGAE sigue en manos de Teddy Bautista”. Ese mismo Teddy Bautista que protagonizó la versión española de Jesucristo Superstar encarnando nada más y nada menos que a Judas.
La perla que da título a esta noticia no tiene desperdicio, y es que ante la pregunta del periodista sobre su opinión del canon digital sobre prácticamente todo dispositivo que lleve pilas y haga ruido -espero que mi despertador quede exento- es que este canon “lo critican porque grava una teórica utilización, y es cierto pero es un mal menor”… “Además el canon son unos céntimos miserables”.
A lo mejor son unos céntimos miserables para él, que según dice ni siquiera usa móvil y me extrañaría que supiese lo que es la tecnología P2P, pero que le pregunte a su compañero Judas -perdón, Teddy – si esos centimitos miserables valen como para llegar a fin de mes – por decir algo – o tiene que ir pidiendo por el metro, como muchos músicos de verdad.
De la piratería el señor Borau afirma que es “una alimaña que crece inesperadamente”.
Continúa hablando sobre la piratería: “Es necesario que la gente se deje de sentimentalismos hacia el de la manta; detrás, el negocio lo hacen unos mafiosos misteriosos e incontrolables que se dedican a las drogas y cosas por el estilo”.
Borau habla también de los supuestos motivos de este tipo de organismos: “El problema es que cuando la gente piensa en un autor o un artista piensa en Almodóvar, en los Oscar, los Nobel, y olvida los miles de creadores que soportan estas profesiones con beneficios muy escasos y un empecinamiento heroico. Para ellos cobrar sus derechos es fundamental para sobrevivir.”
Solo podemos imaginar los derechos que van a cobrar aquellos pobres autores que están empezando… unos céntimos miserables. Y eso sólo si eres socio de esta gran comunidad, claro. Aunque obviamente, la SGAE te va a seguir cobrando si compras uno de sus discos. ¿Dónde acaba ese dinero?.
Parece todo un fichaje para la SGAE. µ
vINQulos
El País