Nuevo retraso en Galileo
El sistema de navegación por satélite actual, conocido por
GPS, está formado por una
constelación de satélites que envían señales a receptores como los ubicados en
los coches. Tanto este sistema como los satélites son de propiedad
estadounidense. Paralelamente y desde hace unos años, Europa inició su propio
sistema de localización por satélite, denominado
Galileo.
En 2005 Europa lanzó el primer satélite del sistema Galileo, que arrancó con
un presupuesto de 3.400 millones de euros, con aportaciones públicas y privadas.
La fecha prevista de finalización era 2010.
Con los datos actuales, se cifra en 2.000 millones de euros la financiación
adicional del proyecto, y los plazos se alargarán considerablemente. Según la
Comisión Europea, los automóviles tendrán que seguir usando tecnología
norteamericana al menos hasta 2012.
La Agencia Espacial Europea
(ESA) será la encargada de la puesta en órbita de los 30 satélites del sistema,
siempre que el Consejo de Ministros de Transporte apruebe las nuevas condiciones
y el presupuesto necesario.
La razón por la que la Unión Europea se ha propuesto el desarrollo del
sistema Galileo es la de finalizar la dependencia del sistema GPS
estadounidense, construido por el Pentágono como proyecto militar, y que según
sus intereses puede ser deshabilitado de manera unilateral, como por ejemplo, en
caso de conflicto bélico.