Nuevo aplazamiento: Google Chrome retrasa la eliminación de las cookies hasta 2024
El plan anterior pasaba por despedirse definitivamente de las cookies de terceros en 2023.
Google lleva meses trabajando para terminar con las cookies de terceros en su navegador Chrome.
Para ello ha creado la iniciativa Privacy Sandbox, con la que busca desarrollar alternativas para la preservación de la privacidad online de los internautas.
Aunque hace un año la compañía de Mountain View explicaba que realizaría pruebas hasta finales de 2022 para despedirse definitivamente de las cookies entre mediados y finales de 2023, su plan vuelve a sufrir revisiones.
Google espera ahora que la disponibilidad general de las APIs de Privacy Sandbox se produzca en el tercer trimestre de 2023 y que las cookies comiencen a desaparecer de Chrome durante la segunda mitad de 2024, de manera gradual.
Del trabajo con desarrolladores, reguladores y otras partes implicadas, ha llegado a la conclusión de que hace falta más tiempo para evaluar las tecnologías de Privacy Sandbox. De ahí que se amplíe el periodo de pruebas, con el consecuente retraso en el adiós definitivo a las cookies.
Los desarrolladores ya tiene acceso a las APIs y, a partir del próximo mes de agosto y hasta 2023, las pruebas se expandirán a otros usuarios.
Más del 45 % de internet sin cookies
“El anuncio de Google puede ser un indicio de que la compañía considera que no hay suficientes empresas que hayan iniciado la transición hacia un modelo alternativo sin cookies”, comenta sobre esta decisión Travis Clinger, vicepresidente sénior de Addressability & Activations de la plataforma de conectividad de datos LiveRamp.
“Independientemente del plazo que haya establecido Google, más del 45 % de internet ya no tiene cookies, las aplicaciones móviles no tienen cookies y la CTV (TV conectada) no tiene cookies”, enumera.
En su opinión, “ha llegado el momento de que los editores y marketers controlen su destino y den el paso desde la identidad basada en cookies a la identidad basada en personas”.
“Hacer el cambio a su opción preferida sin cookies ahora le permite beneficiarse de la escala de las cookies de terceros mientras todavía existen, y también llegar a los consumidores en entornos ya sin cookies”, indica. “Esto puede ser tan fácil como pulsar un interruptor en su DSP o SSP, o desplegar un código sencillo. Retrasar el movimiento sólo significa seguir engañándose a sí mismo para obtener un mejor rendimiento”.
“Dada la incertidumbre económica actual, es especialmente importante optimizar el impacto de cada dólar de marketing y publicidad”, ahonda Clinger.
“Los profesionales del marketing deberían preguntarse si sus inversiones son abordables, responsables y medibles. Aquellos que están avanzando en su futuro sin cookies y negociando en base a los resultados del negocio, en lugar de las métricas tradicionales de alcance y conciencia”, observa, “pueden asegurar que sus inversiones en media están funcionando más que nunca”.