No hay futuro sin inteligencia artificial
Microsoft reúne a 300 empresas para acercar su visión y tecnología relacionada con la IA: Hay que adoptarla en los negocios, pero de forma responsable y transparente.
Está siendo la tendencia más comentada de 2018, aunque no es ni mucho menos nueva. La inteligencia artificial lleva desarrollándose desde hace décadas y está presente en nuestras vidas a pesar de no habernos dado cuenta de ello de forma tan clara como hasta ahora.
Jordi Ribas, vicepresidente corporativo de Inteligencia Artificial de Microsoft Corporation, va más allá y explica que es una de las tecnologías menos comprendidas debido a su intangibilidad “a pesar de que muchas personas ya la están utilizando sin darse cuenta de ello. La IA engloba a todas aquellas tecnologías capaces de hacer cosas similares a las que hacen las personas”. Hacía estas declaraciones en el marco del encuentro que Microsoft ha mantenido esta mañana con más de 300 empresas en Madrid, al que ha denominado Organizaciones Inteligentes en la Economía Digital.
Efectivamente, ya en 1991 Bill Gates, fundador de Microsoft, explicó que quería desarrollar ordenadores y sistemas operativos que pudieran ver, oír y hablar con las personas. En ese momento comenzó el desarrollo de la inteligencia artificial en Redmond.
“Pero hasta ahora no se ha dado la tormenta perfecta, con tres factores que están facilitando la adopción de la inteligencia artificial”, añade. El directivo se refiere a la capacidad computacional, que ha crecido fuertemente gracias a la nube, a la cantidad de datos que se generan cada día por las empresas y usuarios y a la nueva generación de algoritmos de deep learning. “Estos tres factores combinados permiten que la IA sea capaz de llegar a la altura de las habilidades y capacidades humanas”.
Los algoritmos permiten desarrollar nuevas aplicaciones y hacerlas más productivas a distintos niveles: desde la visión a las búsquedas, pasando por la voz, el lenguaje y el conocimiento. Estas tecnologías se pueden aplicar a prácticamente cualquier ámbito tanto en el sector privado como en el público.
No obstante, Pilar López, presidenta de Microsoft España, asegura que la aplicación de algoritmos de inteligencia artificial exige crear un marco ético para diseñarlos y utilizarlos de manera responsable. “Hay que garantizar transparencia sobre cómo operan y funcionan algoritmos cada vez más complejos. En Microsoft nos preocupamos de cumplir estas premisas”, declaraba en rueda de prensa.
Tampoco hay lugar a dudas del impacto que tendrá la IA en las empresas y los puestos de trabajo, algo de lo que se hacían eco los directivos. La nuevas aplicaciones comienzan a llevar a cabo tareas que ha realizado el ser humano de forma tradicional. “Pero esto no significa que las personas vayan a perder sus trabajos, sino que podrán dedicarse a realizar otras tareas más humanas, más complejas que la IA no es capaz de resolver”, apuntaba López.
Al final se trata de que la inteligencia artificial nos haga a todos más productivos y mejore la calidad de vida. “Es necesario un cambio cultural, pero siempre se ha producido con cualquier evolución tecnológica como la que estamos viviendo en estos momentos”, finalizaba Ribas.
Es aquí donde entra en juego la tecnología y los servicios proporcionados por Microsoft a través de Microsoft Azure principalmente. Y existen algunos ejemplos que merece la pena destacar más allá del uso de IA a nivel corporativo. Es el caso de AI for Accesibility, un programa financiado con 25 millones de dólares que busca aprovechar la inteligencia artificial para ayudar a más de mil millones de personas con algún tipo de discapacidad en el mundo. Proyectos como Seeing AI (app para invidentes con lectura de textos o descripción de objetos y escenas) Soundscape (creación de un mapa mental del entorno donde se encuentran los invidentes para describir lo que sucede a su alrededor), Microsoft Translator (especialmente útil para personas sordas) y Helpicto (facilita la comunicación a través de pictogramas con niños que no pueden expresarse verbalmente).
También destaca AI for Earth, con una inversión de 50 millones de dólares en los próximos cinco años para ayudar a las personas que trabajan protegiendo nuestro planeta. Aquí se engloban proyectos como Project Premonition (análisis de insectos para entender y proteger su biodiversidad) y FarmBeats (busca alimentar a la humanidad de forma sostenible aumentando la producción alimentaria mientras se reduce el impacto medioambiental).
Ribas añadía una cita realizada recientemente por el propio Satya Nadella, CEO de Microsoft: “El verdadero poder de la tecnología no se define por lo que es capaz de hacer, sino por lo que nosotros podemos hacer con ella”.