Música celestial
El iPod se ha convertido en el objeto fetiche del siglo XXI. Es casi omnipresente, omnisciente y omnipotente. Digo “casi” porque no lo es tanto como Doraemon quizás, pero ahí se andan. Por eso no nos sorprende que un diseñador haya fabricado una nueva tapa y collar para el iPod Shuffle que lo convierte en una cruz, para que no sólo escuches a Judas Priest sino que además estés en contacto con tu yo espiritual más íntimo. Lo mejor, que un euro y pico de cada venta se dona a la fundación para ayudar a los damnificados en desastres de la Cruz Roja así como a varias organizaciones no gubernamentales de ayuda a la infancia.