Móvil de pulsera para niños (y para tranquilizar a los padres)
Dick Tracy estaría orgulloso de Tinitell, el móvil más pequeño que podrás llevar como si de un reloj se tratase, alrededor de la muñeca, aunque sus funciones son tan limitadas que sólo permite responder llamadas. Y es que Tinitell está pensado para que los niños reciban llamadas telefónicas de sus padres y lo único que tengan que hacer es apretar el botón de respuesta y hablar.
Un pequeño micrófono y un pequeño altavoz, junto con el mencionado (y sobredimensionado) botón de respuesta, conviven con los botones de volumen… y se acabó. No hay nada más que ver. Por dentro tampoco hay que entretenerse mucho en la descripción, puesto que al no haber pantalla los requerimientos de procesador son infinitamente inferiores a lo que estaríamos acostumbrados en cualquier smartphone, aunque sí encontramos GPS y un acelerómetro que permiten la localización del dispositivo y, presumiblemente, su pequeño usuario.
Para realizar llamadas se emplea reconocimiento de voz, con lo que el niño no tiene que marcar ningún número sino tan solo decirle a Tinitell algo como “llama a mamá” o accionar los botones de volumen para que el propio móvil de pulsera vaya recitando los nombres de los contactos y ya sólo habrá que apretar el gran botón de llamada. Estas funciones pueden resultar útiles a determinados usuarios más allá de los niños, desde personas mayores a personas con problemas de visión o movilidad de las manos.
Tinitell puede recibir llamadas desde cualquier teléfono pero se puede limitar esta opción de manera que sólo reciba llamadas de aquel o aquellos números que se autorice, con lo que los padres tendrán la seguridad de que nadie más que ellos (o quienes ellos autoricen) puede ponerse en contacto telefónico con sus hijos. Incluso se puede configurar para que ante la llamada desde determinados números Tinitell acepte la llamada de manera automática, sin que el niño tenga que responder manualmente.
La tarjeta SIM se aloja bajo una batería que permite 60 minutos de conversación y hasta siete días en espera, tiempos que no conocíamos desde antes de que se iniciara la era de los smartphone incapaces de estar más de dos días alejados de un enchufe. La recarga se efectúa en menos de una hora a través de puerto microUSB.
Tinitell se entrega con una pulsera diseñada específicamente para muñecas de entre 12 y 2o centímetros, lo que lo hace ideal para los pequeños de la casa. Actualmente se está buscando dotación presupuestaria para convertirlo en realidad, habiendo superado holgadamente la cantidad solicitada a falta aún de 14 días para que finalice el plazo de solicitud de micromecenas en Kickstarter, la conocida plataforma de crowdfunding. Los primeros en apoyar a Tinitell recibirán uno por $99 mientras que cuando arranque su carrera comercial el precio de venta será de $179.
vINQulo