La moneda digital se cuela en la vida física

Hace unos días supimos que Barcelona contará con una moneda digital local con el fin de apoyar al pequeño comercio de proximidad.

Barcelona En Comú, el partido político liderado por la actual alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, llevaba en su programa la propuesta de la creación de una divisa de uso local, siguiendo el ejemplo de iniciativas como la Bristol Pound (Bristol, Reino Unido), la Sol-Violette (Toulouse, Francia), la SoNantes (Nantes, Francia) o el WIR para las pymes suizas. Lo novedoso es el planteamiento digital de esta nueva moneda municipal, motivado por la necesidad de reducir los altos costes que supone la puesta en circulación de una divisa física.

La moneda digital, que aún tiene nombre –se decidirá mediante un proceso participativo-, pretende reforzar al pequeño comercio local, evitando que el dinero se gaste fuera de la ciudad de Barcelona. No obstante, se podrá cambiar por la moneda oficial en cualquier momento. En cuanto al medio de pago, funcionará a través de tarjetas de monedero electrónicos y dispositivos móviles, según informa La Vanguardia. Las piezas físicas sólo se contemplan desde un punto de vista simbólico o como souvenir para los millares de turistas que acuden a la Ciudad Condal. Sin embargo, no se descarta que los visitantes también hagan uso de la moneda, aprovechando las ventajas que supondrá su utilización.

También en la provincia de Barcelona, Santa Coloma de Gramanet instaurará el año próximo su propia moneda digital local. El proyecto tiene un carácter exclusivamente digital y el usuario podrá hacer uso de este sistema de pagos digital a través de una plataforma de internet y de dispositivos móviles, bien sea mediante una aplicación para smartphones o a través del envío de un SMS con un código identificativo, como se recoge en la web del ayuntamiento.

La moneda permitirá que los comercios que se agreguen a la iniciativa puedan pagar con esta divisa ciertos impuestos, como el IBI. Y se espera que más adelante se también se pueda obtener microcréditos o préstamos, indica La Vanguardia. El consistorio permitirá cobrar con la moneda digital un máximo del 30% del sueldo a los trabajadores municipales que así lo deseen. Igualmente, la nueva divisa servirá para canalizar las subvenciones a las entidades y asociaciones que estén interesadas. Y los ciudadanos también podrán pagar tributos municipales.

Este proyecto se enmarca en el consorcio europeo Digipay4Growth, que está impulsando planes piloto en otras ubicaciones como Bristol (Inglaterra), Cerdeña (Italia). Y en Cataluña también cuenta con la participación de Granollers y de la Agencia del Desarrollo del Berguedà.

En Madrid nos encontramos con la ‘Calle bitcoin’, una iniciativa muy diferente. A diferencia de los casos mencionados, no se trata de una moneda local, sino todo lo contrario. En la capital se ha apostado por el uso de la moneda más universal: el bitcoin. Se han adherido cerca de una veintena de establecimientos ubicados en el entorno de la calle Serrano, en la denominada ‘Milla de Oro’, la zona comercial más lujosa de la ciudad. Se han unido al proyecto firmas de moda, restaurantes, tiendas de alimentación, el centro comercial ABC Serrano e incluso una consulta médica, un estudio de arquitectura o varios bufetes de abogados.

Los comercios tan sólo tienen que disponer de un código QR de su cuenta para que el cliente ordene el pago, que se puede realizar desde el smartphone con una app de bitcoin. Los usuarios sólo tienen que capturar el código y realizar la transferencia.