Molibdenita o grafeno, ¿cuál será el material del futuro?
A diferencia del grafeno, la molibdenita pasa de un estado conductor a no conductor de la electricidad de forma natural.
El grafeno, preocedente del carbono y apodado por algunos como el material maravilla, quiere sustituir al silicio a la hora de fabricar circuitos integrados más potentes. Pero no es el único. Científicos del Instituto Federal Suizo de Tecnología de Lausanne han estado realiando pruebas con un nuevo componente, la molibdenita o MoS2, con resultados satisfactorios.
Este material no sólo permite crear componentes electrónicos realmente pequeños, sino que también resolvería problemas actuales como la oxidación de las piezas, la pérdida de energía y la inestabilidad de rendimiento en los dispositivos.
¿Otra ventaja? Que “a veces puede conducir la corriente, y a veces no”, según explica el responsable del equipo de investigación, Andras Kis, y recoge TechnologyReview. Y es que la molibdenita posee de forma innata un espacio de “banda prohibida” adecuado para su uso en la electrónica, mientras que en el grafeno hay que recrearla con complejos procesos de enfriamiento o cortes muy precisos.
Para crear los primeros circuitos lógicos con este material, los científicos extrajeron láminas de 0,65 nanómetros de espesor y unas 10 micras de un extremo a otro a partir cristales naturales, aunque la molibdenita también se puede fabricar mezclando azufre con metal molibdeno. Después las hojas se convirtieron en transistores y fueron combinadas con conexiones eléctricas de oro.
El reto ahora es encontrar una forma de reproducir el proceso a gran escala.