Microsoft quiere salvar a Vista
Tras reconocer que Windows Vista funcionaba mal, Microsoft ha iniciado una campaña para lavar la imagen del producto e intentar mejorar su posición en el mercado antes del lanzamiento de Windows 7.
La compañía inicia así una estrategia que comienza por el recurso más habitual, el uso de un marketing poderoso y concluyente con el que convencer a los consumidores.
La nueva campaña publicitaria costará unos 300 millones de dólares (algo más de 192 millones de euros) y se centrará en intentar llevar al público una nueva visión de Windows Vista, la de “esa mayoría silenciosa de millones de usuarios muy satisfechos con su experiencia”, como recoge Silicon News Francia.
Además, el gigante del software complementará esta inversión con una novedosa y arriesgada apuesta. Microsoft intentará que quienes rehuyen del producto se convenzan de sus bondades.
La firma invitará, por tanto, a 120 detractores de Vista a testar la nueva innovación incorporada al sistema y hará públicos sus testimonios en una web conmemorativa de la experiencia.