La guerra de patentes tiene un nuevo capítulo por escribir. Tras el enfrentamiento entre Apple y Samsung, Microsoft parece haber tomado buena nota de la prohibición temporal del Galaxy Tab 10.1 en Europa y ya ha elegido a su víctima. La compañía de Redmond ha presentado una denuncia contra Motorola Mobility, recién adquirida por Google, por infringir siete patentes de Microsoft que se emplean en Android.
Como consecuencia, la denunciante quiere que se imponga una prohibición de importación de los teléfonos Motorola en Estados Unidos, según ha detallado en la denuncia presentada ante la Comisión de Comercio Internacional de Washington. Entre las reclamaciones de Microsoft se encuentra la integración de la sincronización del correo electrónico, calendarios y contactos, herramientas “esenciales para la experiencia de usuario de un smartphone”.
Según Bloomberg, Microsoft se muestra convencida de que la Comisión de Comercio Internacional fallará a su favor, pero Motorola “se defenderá decididamente contra la estrategia de negocio de ataque de patentes que lleva a cabo Microsoft”, según ha declarado Jennifer Erickson, portavoz de la firma.
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