Microsoft ha publicado un parche de seguridad para combatir el ataque del virus Flame. En concreto, se trata de una actualización de certificados digitales, que procederá a eliminar los que no son confiables de Windows Vista o Windows 7.
Los que sean calificados como tal pasarán a formar parte de una base en la que se agruparán todos los que son “no autorizados” y que tendrá una actualización diaria.
Este proceso es la solución que en Redmond ha encontrado para hacer frente a Flame. Este virus utiliza un certificado falsificado para no levantar sospechas a la hora de descargar su código malicioso e introducirse en el Windows Terminal Server Licensing Service, que utiliza algoritmos de cifrado más antiguos. Este sistema ha sido suspendido por Microsoft, y sus certificados bloqueados.
En el gigante norteamericano confían en que este procedimiento evitará amenazas similares en el futuro, según explica SlashGear. La rápida actualización de la base de certificados no autorizados debería servir para que las propagaciones de virus con este mecanismo quedará reducidas con prontitud.
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