Microsoft mitigó un ataque DDoS de 2,4 Tbps el pasado mes de agosto.
Esta es la tentativa de mayores dimensiones a la que se ha enfrentado la compañía de Redmond. Según explica, es un 140 % más grande que el mayor ataque al que se había enfrentado en 2020.
El tráfico de este ataque se originó en unas 70 000 fuentes desde varios países de la región Asia-Pacífico además de Estados Unidos.
Al final el ataque no llegó a su destino, que era un cliente de Azure en Europa, ya que se puedo mitigar en los lugares de origen, como Malasia, Vietnam, Taiwán, Japón y China.
Microsoft explica que se extendió durante diez minutos con ráfagas de corta duración.
En total, se produjeron tres picos principales. El primero fue el de los 2,4 Tbps, mientras que los otros llegaron a 0,55 Tbps y 1,7 Tbps.
El año pasado, Amazon Web Services le plantó cara a un ataque de 2,3 Tbps, ahora superado por el de Azure.
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