“La explotación infantil online es un crimen horrible que requiere un enfoque de toda la sociedad”.
Con estas palabras ha introducido Microsoft sus avances en la detección del acoso sexual a menores con una nueva técnica que usa Project Artemis como nombre en clave y que surge de la colaboración de la compañía de Redmond con The Meet Group, Roblox, Kik y Thorn.
Basada en tecnología patentada de Microsoft, esta técnica es capaz de actuar sobre charlas en forma de texto. Evalúa las características de la conversación y acaba aplicando calificaciones de probabilidad, de tal modo que podría remitir ciertas charlas a revisión por parte de moderadores humanos cuando se sospecha que hay una amenaza inminente, cuando un depredador online intenta atraer a niños con fines sexuales. Y, de ahí, el caso pasaría a manos de las fuerzas del orden.
Para evitar que los menores caigan en la trampa de los acosadores, la tecnología de Project Artemis se pondrá a disposición de empresas que ofrecen funciones de chat, que ya la pueden licenciar.
La propia Microsoft ha aprovechado esta técnica en programas de Xbox y ahora estudio su uso en servicios como Skype.
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