Mejora el suministro de microchips, reduciéndose los ERTE en la automoción
Se recupera la producción de microchips, con lo que comienzan a reducirse los ERTE en el sector de la automoción.
Tras un primer trimestre del año 2022 en que los efectos del cuello de botella en la producción de microchips se ha dejado nota en distintos sectores, el de la automoción comienza a reaccionar ante la mejora de la producción de semiconductores.
El caso de las fábricas automovilísticas españolas ya se ha comunicado por parte de Renault y de Seat que no van a prorrogar los ERTE que mantenían puesto que es en sus previsiones entran volver a disponer de la capacidad prevista para una producción normal durante el segundo semestre del presente año.
Por su parte las fábricas en España de Mercedes y de Volkswagen han empleado menos días de los que tenían previstos por sus respectivos ERTE para interrumpir sus respectivas producciones, lo que también es indicativo de que se normaliza el suministro de microchips, un componente esencial y que ha mantenido paralizadas fábricas de todo el mundo.
Otro grupo, Stellantis (con plantas en Aragón, Galicia y Madrid), que tenía pactado un ERTE para la totalidad del año 2022, anunciado que la situación ha mejorado y que, a pesar de mantener la previsión de algunos días de parada de la producción, tanto para el presente mes de junio como para el mes de julio se plantea una previsión de sustancial mejora que podría incluso llevar a tener que trabajar durante algunos fines de semana para recuperar la producción perdida. En el caso concreto de la planta aragonesa de la marca en Figueruelas (Zaragoza) ya se habría normalizado la producción desde hace un mes.
Prórrogas de ERTE como precaución
En el caso de Volkswagen sí se va a prorrogar el ERTE aunque se aclara que será como medida de precaución en caso de necesidad. Se trata, no obstante de una interrupción de la producción, pactada con los representantes sindicales, de siete días al año.
Finalmente, la planta de Ford en Almussafes (Valencia), ha llegado a un acuerdo parcial con los representantes sindicales para la prórroga del ERTE hasta final de junio debido a que todavía no cuentan con un suministro asegurado de microchips. En el calendario pactado se contemplan interrupciones de la producción durante seis días a lo largo del mes de junio y cuatro días a lo largo del mes de julio.