“No se puede hacer que algo funcione sólo con anuncios”
Aunque algunos asistentes bromeaban en Twitter con que les estaban dando gato por liebre (“es que se ha cambiado de look”, señalaban desde la organización del encuentro), Thomas Ryan estuvo en la European Ecommerce Conference, que se celebra a lo largo del día en el madrileño Circo Price, para hablar desde la pasión – y pasión es una de sus palabras favoritas – sobre como conseguir el éxito en el mercado del comercio electrónico.
Su compañía, Threadless, es un ejemplo de lo que se puede conseguir. Llevan diez años en el mercado y son uno de los grandes – y quizás sorprendentes -éxitos de la red. Tienen, sólo por poner un ejemplo, un millón de suscriptores a su newsletter. Su funcionamiento es un ejemplo de lo que se puede conseguir apostando por la comunidad: cada semana sacan a la venta el diseño propuesto por sus propios usuarios.
La comunidad, confesaba Ryan, es uno de los pilares de su compañía, así como la creatividad y confiar en la honestidad de hacer un negocio transparente. Las grandes ideas, han aprendido, “vienen de cualquier lugar, de cualquiera”. Lo más importante es conseguir apasionar: hay que hacer que los empleados y los usuarios se apasionen con el producto. El resto vendrá rodado.
La empresa, eso sí, tiene que actuar “humanamente”, es decir, hacer juego limpio y tomar responsabilidades. Los consumidores, explicaba Ryan, “son inteligentes y aprecian tener a alguien con quien hablar”. “El marketing es lo que sucede cuando tienes buenos productos”, confesaba, invitando a acabar con la publicidad. La gente quiere compartir, explica, y habla de las cosas que le gustan. “Los diseños no mueren cuando imprimes la camiseta”, señala sobre sus productos. “La gente sigue hablando de ellos”. “No se puede hacer que algo funcione sólo con anuncios”, defiende.