Maquinitas tamaño natural
Yo ya llevo tiempo planeando construirme una máquina de videojuegos a medida para casa. Al principio pensé en hacerme yo todo, pasándome antes por el Leroy Merlin y dándole a la serreta y al Titanlux. Luego pensé en comprarme uno de esos muebles de tamaño natural con mandos incluidos e instalar un PC y un televisor dentro, pero, como siempre, mi vaguería natural se impone a mis deseos más salvajes. Por fortuna, la gente de Gameroom Classics está al quite para remediarlo, con cuatro unidades con todo integrado que han presentado también en el CES. Ninguna tiene el Galaga o el Burger Time, pero habrá que hacer de tripas corazón. Tres de los modelos son para poner encima de una mesa: una con un popurrí de juegos clásicos, un modelo SNK Playmore y otro con clásicos de Capcom. El cuarto es una máquina completa que, claramente es la que hay que comprar. El interfaz de usuario es bueno y los mandos también. Eso sí, los modelos de sobremesa cuestan 750 euros y el completo más de 850, pero todo es poco para volver a tu adolescencia sin que te vuelvan a salir granos o volver a sacarte el carné de conducir.