Mamá, quiero ser ciberdelincuente
El mamá quiero ser artista podría cambiar a un mamá quiero ser ciberdelincuente. La delincuencia en el ciberespacio ha dejado de ser una profesión de futuro y se ha convertido en uno de los pocos mercados a los que la crisis no les está tocando.
En tiempos de recesión, el malware y sus conscuencias sigue saliendo a cuenta a sus creadores. “La economía sumergida no se ve afectada por la crisis”, reconoce el director de marketing de Symantec, Luis Fuertes, ante las cámaras de NetMediaEuropa, al tiempo que confirma que se está produciendo una cada vez mayor profesionalización de los delincuentes del ciberespacio.
Cada vez menos amateurs, los cacos 2.0 saben lo que hacen y lo que quieren, así como las técnicas para lograrlo. “Están organizándose como una empresa normal”, explica Fuertes, una empresa, por otro lado, que va a seguir dando dividendo en estos tiempos complicados.
Fuertes reconoce, además, que la extensión de la banda ancha en varios países, especialmente en los del Tercer Mundo, está dando alas y empuje a esta industria, que encuentra en estos países “un por carencias” de los mismos en materia legal. Los países subdesarrollados están empezando a “ser sus santuarios desde los que lanzar ataques“.
Más información sobre la industria del cibercrimen en el siguiente vídeo: