Más de la mitad del malware para dispositivos inteligentes se ha creado en 2017
Los ciberdelincuentes están aprovechando la inseguridad demostrada por el internet de las cosas y lanzan la mayoría de los ataques contra grabadoras de vídeo digital y cámaras IP.
Cada vez habrá más dispositivos inteligentes conformando la red del internet de las cosas. Y, si no se buscan soluciones y se sigue como hasta ahora, los riesgos de seguridad serán importantes.
Tal y como advierte Kaspersky Lab, “debido a la gran cantidad y variedad de dispositivos” inteligentes que existen, desde relojes y televisores a routers y cámaras, “el IoT se ha convertido en un objetivo atractivo para los ciberdelincuentes. Al hackear con éxito los dispositivos IoT, los criminales son capaces de espiar a la gente, chantajearlos e incluso convertirlos discretamente en sus compañeros de crimen. Lo que es peor, botnets como Mirai y Hajime han indicado que la amenaza va en aumento”.
Kaspersky Lab calcula que, las muestras de malware contra dispositivos inteligentes ha superado ya la cifra de 7.000. Más de la mitad, además, habría surgido en lo que llevamos de 2017, lo que da cuenta de su rápida evolución.
A la hora de profundizar hacia dónde se dirigen los ataques, los expertos revelan que buena parte tiene como objetivo grabadoras de vídeo digital y cámaras IP. Y una quinta parte va contra dispositivos de red. Mientras, por países, los más amenazados son China, Vietnam, Rusia, Brasil, Turquía y Taiwán.
“El IoT es frágil” y se encontraría “expuesto frente a los cibercriminales”, lo que explica su creciente interés por los dispositivos inteligentes, según Kaspersky. “La gran mayoría de los dispositivos inteligentes ejecutan sistemas operativos basados en Linux, facilitando los ataques”, indica la firma de seguridad, ya que “los criminales pueden escribir código malicioso genérico que se dirige a un gran número de dispositivos en simultáneo”.
Además, hay que tener en cuenta que los dispositivos suelen venir sin solución de seguridad y las actualizaciones no son frecuentes. “Esto significa que hay millones y millones de dispositivos potencialmente vulnerables -o tal vez incluso dispositivos que ya han sido comprometidos”, advierte Kaspersky.