Mailbox ya puede instalarse sin necesidad de invitaciones ni listas de espera

La razón para la oferta escalonada de los servicios de Mailbox no era otra que la falta de liquidez de la empresa para poder disponer de los suficientes servidores como para poder gestionar la información de sus abonados.

Merced a la inyección de dinero procedente de su adquisición por Dropbox es posible que ya no tengamos que aguardar en una lista de espera a que nos llegase el turno de poder acceder a este pretendidamente revolucionario sistema de gestión de correo electrónico. Con un espíritu distinto al de otras aplicaciones similares, la app de Mailbox (ya disponible para iOS hace gala de una premisa fundamental: la bandeja de correo entrante debe permanecer vacía.

Para ello articula una automatización de los procesos de clasificación de mensajes entrantes, agrupándolos por cadenas, permitiendo diferir la lectura de un correo a un momento posterior (unas horas, unos días…) momento en el que volverá a aparecer en nuestra bandeja de entrada para recordarnos que debemos ocuparnos del mismo.

Toda esta clasificación la efectúa Mailbox de manera automatizada y de hecho, lo primero que nos pedirá (y es una prueba de fe que ofrece satisfactorios resultados) es que le concedamos libertad absoluta para archivar todo el correo anterior a la fecha en la que comenzamos a usar esta aplicación. A partir de ahí comienza a gestionar todo el nuevo correo entrante (mientras los antiguos correos permanecen archivados pero evidentemente con la posibilidad de consultarlos en cualquier momento). El usuario maneja mediante gestos de barrido las acciones sobre los mensajes, facilitando la interacción en busca de esa ansiada bandeja de entrada vacía de mensajes pendientes.

Como pega debemos recordar que Mailbox por el momento sólo es compatible con cuentas de correo electrónico de Gmail, algo en lo que se supone están trabajando para permitir el manejo de cuentas externas al servicio de email de Google.

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