Los televisores de plasma tienen sus días contados

La Unión Europea fijará un nuevo estándar limitando el consumo energético de los dispositivos electrónicos, una normativa que afectará a los televisores de plasma.

Una vez que la tecnología LCD invadió el mercado para colocarse como sustituto preferido de los televisores de rayos catódicos, o CRT, tradicionales, los televisores de plasma encontraron su hueco en los grandes formatos. Hubo un momento en que LCD defendió su territorio hasta las 40 pulgadas mientras que la tecnología de plasma se apresuraba a mantener su dominio por encima de este tamaño. Pero una vez más los adelantes técnicos hicieron que los LCD dejaran de respetar ese pacto para ofrecer grandes tamaños de pantalla.

Los televisores de plasma, por tanto, se han visto acosados casi desde su inicio y parece que su alto consumo es otro de sus grandes enemigos. Según el Daily Mail, la Unión Europea fijará la próxima primavera unos nuevos estándares máximos de consumo energético en dispositivos electrónicos, y los televisores de plasma lo superarán; al menos la mayoría de ellos, puesto que algunas empresas, contagiándose de esa corriente ‘green’ que parece afectarnos a todos, han desarrollado modelos de televisores de plasma que no dañan el medio ambiente y que además no superarán esos máximos.

No obstante, la tecnología de plasma que, como hemos dicho, debe luchar contra la LCD y sus niveles de consumo, tiene otro enemigo rondando sus puertas, se llama OLED y es el futuro de los televisores. Su principal ventaja es que mediante componentes orgánicos autoluminescentes prescinde de retroiluminación, lo que reduce enormemente su consumo y hace que sean más delgados; además su calidad de imagen será mayor y ofrecerán más brillo y contraste.