Los teléfonos móviles retan al iPod
La omnipresencia de los teléfonos móviles les convierten en el próximo objetivo de los servicios de descargas de música.
El potencial de Europa
Gilles Babinet, presidente y fundador de Musiwave, la compañía sobre la que se basa el servicio de descarga de música para teléfonos móviles que Vodafone ha lanzado en toda Europa esta semana, cree que los teléfonos móviles son un desafío para iPod, el reproductor de música portátil de Apple. Babinet está seguro de que los usuarios encontrarán natural comprar y escuchar música en los teléfonos móviles, aunque en algunos países más que en otros.
“En Europa los teléfonos móviles son probablemente la única fuerza que puede realmente competir con iTunes”, señala Babinet, destacando que es probables que los europeos adopten mejor la música en sus móviles que la compra de canciones en el servicio de descarga de música de Apple Computer. “La atracción para los consumidores de Estados Unidos será menor porque iTunes está mucho más desarrollado”.
El potencial de los dispositivos móviles son una plataforma para el despliegue de música es claro. Hay cientos de millones de usuarios de teléfonos móviles, particularmente en los países europeos, donde el índice de penetración puede alcanzar el 80 por ciento de la población. Esta cifra representa un enorme mercado potencial para los millones de usuarios que utilizan iPods u otros reproductores de MP3.
Pero las compañías que vender contenido para dispositivos móviles se enfrentan a diferentes retos tecnológicos y de marketing comparando con los negocios de despliegan servicios online basados para los PCs. Algunos ven ahora estos mercados como un distintivo más que como un mercado competitivo. Esto está aumentando el espectro para dos clases de servicios, con modelos de precios diferentes y posibles muros que podrían impedir que la música comprada desde el teléfono móvil pasara al PC o viceversa.
La ambición europea y asiática
Vodafone, una de las compañías de telefonía móvil más importantes de mundo, y muy innovadora, quiere unir el mundo de los terminales móviles y el PC con su nuevo servicio europeo. De forma contradictoria, el servicio es un signo de división en el sentido de que muestra la creciente divergencia en la forma en que los americanos y sus pares en Europa y Asia utilizan la tecnología para encontrar y escuchar la música.
El mercado estadounidense permanece dominado por los servicios basados en PC y dispositivos como el iPod e iTunes. Se han lanzado un puñado de servicios de música para móviles, pero en su mayoría implica la descarga de la música en el PC y su posterior transferencia en un teléfono.
En Europa y Asia, las operadoras y discográficas piensan de una manera más ambiciosa. Ven la última generación de teléfonos multimedia conectados a Internet como dispositivos más comunes que el iPod capaces de facilitar el impulso de compra de música en cualquier momento.
La idea todavía es joven. La música para teléfonos móviles es relativamente cara y escasa. Actualmente sólo hay disponibles 3.000 canciones a través del servicio de descargas de música de Vodafone, aunque la compañía ha prometido aumentar la cifra hasta 50.000 en unos meses.
Respecto a los formatos, éstos son inestables. Vodafone ofrece versiones completas de las canciones. Por contraste, la operadora alemana T-Mobile vende canciones reeditadas de dos minutos de duración que se descargan más rápidamente. Además, algunas discográficas europeas distribuyen álbumes en tarjetas de memoria que se introducen directamente en los terminales móviles.
Las operadoras de telefonía, principalmente en Europa, ven la música y los próximos servicios de vídeo como una manera de atraer a la gente a sus redes de tercera generación, o 3G, que llevan el acceso a la banda ancha a los móviles. En conjunto, las operadoras europeas han gastado más de 100.000 millones de dólares en comprar el espectro necesario para ofrecer servicios de banda ancha y buscan desesperadamente recuperar sus inversiones.
Por su parte, las ventas de tonos de llamadas indican que el mercado móvil es una mina de oro. La firma de investigación de mercado estima que el pasado año se gastaron en todo el mundo 4.100 millones de dólares en tonos de llamadas y melodías, y la industria discográfica ha tomado nota.
Más allá de los tonos
Conseguir un precio correcto para la música en los teléfonos móviles puede convertirse en un dolor de cabeza. Vodafone cobra unos 2,75 dólares por cada canción y en Japón, la operadora KDDI planea lanzar un servicio este mes que ofrecerá descargar canciones de manera inalámbrica por entre dos y tres dólares. Estos precios deben compararse con el precio por canción de 99 centavos de iTunes y otros servicios basados en PCs. Además, el coste de descargar canciones es comparable al de comprar un CD.
Las discográficas están poco dispuestas a bajar el precio de las canciones. Los usuarios han estado pagando entre dos y tres dólares por un tono de llamada sin demasiadas protestas, en parte porque no hay nada comparable con ellos fuera de los teléfonos.
La capacidad de la red también es un problema. Según Babinet, el nuevo servicio de Vodafone comprime la música en el formato AACPlus, que crea archivos mucha más pequeños que un archivo en MP3 equivalente. En una verdadera red de 3G puede tardar entre 5 y 15 segundos.
La gestión de derechos digitales es otro tema. Las discográficas esperan poder evitar el intercambio de descargas móviles entre teléfonos o sobre las redes peer-to-peer basadas en PC.
La primera versión de un estándar para la gestión de derechos digitales fue creado por la Open Mobile Alliance (OMA), pero una segunda versión está ganando popularidad por lo que se están produciendo las incompatibilidades a las que la industria de las tecnologías de la información tiene acostumbrados a los usuarios.