Los riesgos de compartir gadgets sin proteger
Aunque Kaspersky Lab calcula que uno de cada tres españoles que usan dispositivos con conexión a Internet los comparte, casi una cuarta parte no implementaría medidas de seguridad.
Pasarse un dispositivo de unos a otros es una práctica que podría parecer inofensiva pero que conviene comenzar a analizar y corregir.
Al menos, si tenemos en cuenta los datos de uso que ha detectado Kaspersky Lab en España a través de una colaboración con B2B International.
“Compartir un ordenador, tablet o smartphone aumenta el riesgo de infección por malware, pérdida de datos o robo de cuentas”, cuenta el analista principal de GREAT Vicente Díaz, “por lo que es importante tomar precauciones”.
¿Por ejemplo? Hacer cosas como “guardar siempre copias de seguridad de archivos importantes; eliminar la información que no queremos que caiga en las manos equivocadas (sobre todo mediante la desactivación del relleno automático); tratar de controlar los derechos de acceso de un usuario a un dispositivo y, lo más importante, usar programas y soluciones que proporcionen protección frente a las ciberamenazas”, enumera Díaz.
El caso es que en nuestro país se calcula que uno de cada tres usuarios de dispositivos con conexión a Internet se lo presta a sus conocidos, sobre todo si éstos son adultos. Así, el 29% se los dejaría a personas que son mayores de edad y estando en casa.
Las cifras bajan a la hora de compartir con niños (el 5% le deja esta clase de dispositivos a sus hijos) y con compañeros de trabajo u otras personas (2%).
A partir de ahí la situación se complicaría. Casi una cuarta parte de quienes acceden a que terceros usen sus gadgets no implementaría medidas de seguridad que blinden sus datos al no creerlo necesario. Menos de la mitad se preocuparía de hacer backups. Y una quinta parte exacta tampoco recurriría a contraseñas.
A la hora de pensarse qué es lo que guardan en estos dispositivos y lo que no van a acumular, por si acaso, la gente que intenta discriminar y evita que haya información sensible al alcance de los demás tan sólo representa el 26%.