Los plazos en el despliegue de la banda ancha móvil en Europa

A medida que los consumidores europeos, ávidos cada vez de más datos, claman por servicios más rápidos de Internet (para descargas y juegos online) la industria de telecomunicaciones está deseosa de utilizar el espectro radioeléctrico de ultra alta frecuencia, o UHF, para evitar una saturación de la capacidad futura.

Pascal Lamy, exdirector general de la Organización Mundial del Comercio, ha presentado este lunes su informe a la Comisión Europea sobre cómo se debe repartir la banda del espectro UHF en Europa, que va desde los 470 MHz hasta los 790 MHz.

Los operadores de telecomunicaciones están ansiosos por utilizar este espectro, pero es un recurso finito: no se puede agregar o aumentar, solo reasignar.

Los reguladores de los gobiernos, dueños del espectro y quienes designan su distribución, defienden que las emisoras terrestres no deben debilitarse financieramente por el traspaso.

Mientras tanto, los operadores de telecomunicaciones pueden utilizar esta banda para ampliar sus servicios de cobertura inalámbrica de cuarta generación (4G), hasta ahora limitada a la gama del espectro de 800 MHz.

De acuerdo con The Wall Street Journal, las recomendaciones de Lamy pasan porque la banda ancha móvil tenga el uso exclusivo de la banda de 700 MHz (694 MHz -790 MHz) para el año 2020. A cambio, debe garantizarse la transmisión de las emisoras terrestres -que utilizan señales de radio para el espectro UHF restante, por debajo de 700 MHz (470 MHz -694 MHz)- hasta 2030 para asegurar la estabilidad comercial.

La GSMA también ha pedido la revisión para el año 2020 en lugar de 2025, como propone Lamy, y el intercambio de las bandas entre el móvil y la radiodifusión a partir de 2015.

En América del Norte partes de la banda de radiodifusión de televisión de alta frecuencia ya han sido reasignadas a la comunicación para telefonía móvil. China, Japón y Corea también están ofreciendo a los operadores un marco para el uso de este espectro.