Los nuevos Lumia 920 y 820: el secreto está en el interior
Más allá del diseño o el precio (que no ha trascendido), lo que hace que los dispositivos sean competitivos es el aprovechamiento de Windows Phone 8.
La llegada de Windows 8 a los smartphones fue un acontecimiento que inauguró Samsung. La surcoreana presentó su ATIV S la semana pasada, pero fueron escasos los detalles que trascendieron.
Nokia es el partner mimado de Microsoft. El más reciente resultado de la alianza, presentado ayer en Nueva York, pone énfasis en las fortalezas centrales de la compañía finlandesa. Los servicios como Nokia Maps, Nokia Transport y Nokia Drive han sido actualizados para incluirse de forma muy provechosa en los nuevos Lumia 920 y 820.
La finlandesa ha decidido destacar en el mapa tecnológico mejorando la experiencia de Windows Phone 8; más que añadir nuevas características, Nokia las ha mejorado. Y esto puede interpretarse como el lanzamiento de un órdago: a los demás fabricantes de WP8 e incluso a Android.
El buque insignia es sin duda el Lumia 920, que integra cámara PureView de 8,7 megapíxeles y carga inalámbrica (característica que ya se le asociaba). Una pantalla de 4,5 pulgadas con una gran resolución completan un modelo que incluye en sus entrañas un procesador de doble núcleo Snapdragon S4 a 1,5 GHz.
El Lumia 820, un escalón por debajo del 920, tiene el mismo procesador, una cámara de 8 megapíxeles y carga inalámbrica. La ausencia de características como la tecnología Pureview o una menor capacidad de almacenamiento completan la apuesta de gama media pero altamente competitiva de Nokia.
Los analistas consultados por Reuters prevén que el verdadero auge de Windows Phone 8 llegará con el lanzamiento, el próximo 26 de octubre, de Windows 8. La posibilidad de construir apps para ambos (versión móvil, versión de escritorio) es un valor añadido para desarrolladores que se verá impulsado en cuanto aumente la base de usuarios.
Además, la amenaza de un cambio en el panorama TIC derivado del fallo en el juicio Apple/Samsung y la debilidad de RIM ofrecen a Windows Phone la oportunidad de posicionarse como ecosistema competitivo.