Los internautas españoles registraron 14.151 dominios .es en 2004
Los usuarios de Internet registraron en el mismo periodo hasta 1,3 millones de direcciones alemanas .de y 1,1 millones de dominios británicos .uk
Los internautas apenas registraron 14.151 dominios de Internet “españoles” durante 2004, lo que supone una media de 39 direcciones Web diarias, 11 de segundo nivel (.es) y 28 de tercer nivel (.com.es, .org.es, .nom.es, .edu.es y .gob.es), según la información facilitada por la Asociación de Internautas (AI).
Frente a estos datos, los usuarios de Internet registraron en 2004 hasta 1,3 millones de direcciones alemanas .de y 1,1 millones de dominios británicos .uk. Del mismo modo, durante el pasado mes de diciembre se registraron en España 1.245 nuevos dominios bajo .es, de los que 563 fueron de segundo nivel y 682, de tercero. En el mismo periodo, por contra, en Alemania y Reino Unido las cifras alcanzaron, respectivamente, 89.827 y 80.932.
En cambio, en el mismo mes los internautas españoles registraron 15.090 dominios genéricos (.com, .net y .org), situando a España en el puesto noveno de la clasificación mundial de países con mayor número de dominios genéricos, con un total de 641.172 dominios a fecha de ayer, 17 de enero.
Este índice está encabezado por Estados Unidos, con 29,3 millones, al que le siguen Alemania (2,9 millones), Reino Unido (2,2 millones), Canadá (1,7 millones), Francia (1,2 millones), China (1,1 millones), Australia (833.975) y Corea (797.113), mientras que Japón se sitúa ya por detrás de España, con un total de 624.544 dominios genéricos.
La AI considera que tanto el agente registrador dependiente de Red.es, ESNIC, como los más de treinta registradores acreditados “tendrán que reunirse con urgencia, ya que muchos de los contratos no se han cumplido en cuanto al mínimo de registros que ESNIC obliga a un registrador, por lo que deberían dejar de ser registradores del dominio .es”.
Además, señala que las cifras de dominios genéricos en España “nada tienen de extraño” debido a sus “nulas trabas burocráticas (sólo que no exista el dominio frente a múltiples incompatibilidades), su rapidez (instantánea, frente a las mínimas 24 horas de ESNIC para uno de segundo nivel), su precio (110 euros, frente a una media de 15 dólares) y su facilidad (frente a lo desesperante de los .es)”.