Este año el mercado de dispositivos informáticos se resentirá. No será capaz de alcanzar las cifras de épocas anteriores.
La suma de ordenadores, tabletas y teléfonos móviles bajará de los 2000 millones de dispositivos. Si en 2021 se consiguieron colocar en todo el mundo 2065 millones de unidades, en 2022 la cifra final será de 1907 millones.
Así lo pronostica Gartner, que prevé una caída del 7,6 % en los envíos mundiales de dispositivos.
Algunas zonas geográficas como China y el este de Europa podrían registrar incluso descensos de dos dígitos.
Por ejemplo, los analistas creen que los envíos de smartphones en China descenderán un 18,3 %. El colapso previsto para este país significará incluso una disminución del 2 % en modelos 5G, que en 2021 habían registrado un crecimiento del 65 %.
La política de tolerancia cero con la COVID-19 en el país asiático está provocando cambios en el consumo. Los usuarios están dejando de adquirir artículos no esenciales, y esto incluye los teléfonos móviles.
A nivel mundial, los envíos de teléfonos móviles disminuirán este año un 7,1 % por debajo de los 1500 millones de unidades. Los envíos de teléfonos inteligentes lo harán “sólo” un 5,8 %.
El número de tabletas vendidas en 2022 será de 142 millones, un 9 % interanual menos.
¿Y qué pasará con los ordenadores tradicionales? Gartner considera que sus envíos descenderán un 9,5 % desde los 342 millones de hace un año hasta los 310 millones de PC. Es decir, este segmento sufrirá la caída más pronunciada de todas las categorías de dispositivos analizadas.
En la región EMEA (Europa, Oriente Medio y África), la disminución será incluso mayor: del 14 %.
La invasión rusa de Ucrania, el incremento de los precios y la falta de disponibilidad de productos debido a los confinamientos por el coronavirus en China están afectando la demanda.
Ranjit Atwal, director analista sénior en Gartner, habla de “una tormenta perfecta” conformada por “convulsión geopolítica, alta inflación, fluctuaciones monetarias e interrupciones en la cadena de suministro“.
Todo esto reducirá la compra de dispositivos “a nivel empresarial y de consumo en todo el mundo”. Atwal explica que impactará “más fuerte al mercado de PC en 2022” y a la parte de consumo, que “va camino de disminuir un 13,1 %” y “se desplomará mucho más rápido que la demanda de PC empresarial, que se espera disminuya un 7,2 % interanual”.
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