Los 7 cambios tecnológicos que llegarán con el 2023
El WiFi 7, la realidad virtual y la computación cuántica cobrarán importancia durante los próximos meses.
La tecnología ha ayudado a empresas y usuarios a continuar con sus vidas durante la época de la pandemia de la manera más normalizada posible.
Ahora que la crisis sanitaria ha sido desplazada por la inflación, la inminente recesión o la invasión de Ucrania entre las grandes preocupaciones de empresas y la sociedad en general, ya hay quién se pregunta qué nos deparará el próximo curso.
Con el inicio del segundo semestre, la consultora española de desarrollo digital Syntonize ha trazado una lista con las siete tendencias de corte tecnológico que, en su opinión, marcarán el devenir de 2023.
Una de ellas es la evolución de la realidad virtual. Sus expertos esperan avances en procesadores gráficos y la potencia de los dispositivos más allá de mundo del gaming. El sector educativo podrá aprovechar esta tecnología para mejorar la experiencia de aprendizaje y el sector del turismo podría proponer visitas a lugares que ya no existen o a otros sitios de interés sin salir de casa.
En el caso de la inteligencia artificial, tiene potencial para brillar en manufacturas. “Factores como tecnologías anticuadas, sistemas de organización poco eficaces o escasa inversión en I+D hacen que se desperdicien grandes niveles de energía, materiales y tiempo”, explica Syntonize. La inteligencia artificial permite procesar datos para conseguir una producción más sostenible, reduciendo el desperdicio hasta un 50 %.
También se prevén mejoras en avances médicos, para la detección temprana de enfermedades como el cáncer. Las nuevas tecnologías permitirán diagnósticos mejorados y la propia revolución de los tratamientos, desde la edición de genes a la inmunoterapia.
En cuarto lugar, Syntonize ve posibilidades en el cifrado. Parece que 2023 será el año de la “criptografía de grilla”, que consiste en ocultar los datos de usuario en estructuras algebraicas complejas para luchar contra los ciberdelincuentes.
Se podría decir adiós a las contraseñas o, al menos, a su uso masivo. ¿Cómo? Buscando alternativas. Lo más inmediato será reemplazarlas por sistemas biométricos, desde el reconocimiento de las huellas dactilares de los usuarios hasta la detección del rostro o la voz.
De igual modo, el mundo se alejará de las conexiones a internet por cable tras la llegada de WiFi 7, capaz de soportar modulación de amplitud de cuadratura en 4K y de aprovechar canales en 320 Mhz. Será posible agregar múltiples canales con diferentes frecuencias al mismo tiempo y disfrutar de velocidades más rápidas con baja latencia.
Por último, la computación cuántica ayudará a resolver problemas complejos. Por ejemplo, el desarrollo de nuevos medicamentos, la lucha contra el cambio climático y la reducción de los ciclos de desarrollo de los productos con ahorro de costes en I+D.