Lo que debe cubrir una buena formación en Big Data
La capacidad de trabajar en proyectos transversales y entrar en contacto con las herramientas de los diferentes fabricantes resulta crucial.
El objetivo del Big Data es aumentar los conocimientos empresariales, usar esa visión para cambiar el negocio y así impulsar el retorno de la inversión (ROI).
De acuerdo con Gartner, el 73% de las empresas ya invierte o piensa invertir en Big Data en los próximos dos años. En este contexto, las profesiones relacionadas con esta materia serán de las más demandadas en 2015.
Los beneficios de Big Data se aplican a todos los sectores interesados en mejorar la experiencia de cliente y la eficiencia de los procesos de negocio.
Sin embargo, para poner en marcha un proyecto de Big Data se necesitan profesionales con conocimientos a escala de sistemas, tecnologías y metodologías, que permitan tratar la cantidad ingente de datos que reciben y acumulan las organizaciones de una manera rápida y flexible.
Según el MBIT School, centro de formación español dedicado exclusivamente a Business Intelligence y Big Data, existen una serie de características imprescindibles que debe cubrir una buena formación en Big Data.
Entre ellas destacan la capacidad de ofrecer al candidato la posibilidad de trabajar en proyectos transversales: finanzas, RRHH, ventas, etc.; y entrar en contacto con las herramientas de los diferentes fabricantes, a través de proyectos reales en marcha, para poder valorar las funcionalidades de cada una de ellas.
La UE ha estimado que en 2015 habrá 900.000 vacantes asociadas a las Tecnologías de la Información y la Comunicación y aumentará la búsqueda de especialistas en la gestión de grandes datos.
Analistas de datos, programadores, arquitectos tecnológicos, data manager, consultores, product manager y analistas en proyectos de I+D son los perfiles más demandados, de acuerdo con el MBIT School.
Un estudio ha señalado que la aportación del Big Data a la economía europea será multimillonaria. En 2020 inyectará 206.000 millones de euros a la región, lo que supondrá un aumento del 1,9% del PIB.