Lenta pero firme progresión del mercado de la Smart TV en España
Un estudio revela que 4,5 millones los españoles que tienen una Smart TV. Un 19% de los encuestados podría renovar sus equipos en Navidad.
Es una evolución natural. La llegada de la Smart TV a España ha cambiado los hábitos de consumo de los usuarios y está desplazando a la televisión tradicional.
Así lo acreditan las cifras del estudio elaborado por IAB Spain. Ya son 4,5 millones los españoles que tienen una Smart TV. A pesar de la gran penetración, sólo la mitad de los usuarios la utilizan.
Las principales barreras de uso, destaca el estudio, tienen que ver con la utilización de otros dispositivos para acceder a contenidos (25%) o la conexión lenta (21%). Ya a cierta distancia se alude a la falta de tiempo/costumbre (9%) o a la complejidad de uso (6%).
El perfil del usuario que utiliza la Smart TV es el de un hombre de entre 16-29 años. A medida que avanza la franja de edad su uso mengua (11% de usuarios de 45-55 años).
Un dato que acredita la consolidación de las Smart TV en España es la forma de acceso. En 2013, el 50% de los usuarios accedía a la televisión conectada a través de la consola conectada a la televisión. En 2014 el porcentaje cae hasta el 35%.
Actualmente el 54% de los usuarios afirma ver TV conectada directamente desde una Smart TV.
Preguntados por las ventajas y desventajas de las televisiones conectadas, el 22% cita como punto favorable la posibilidad de acceder a contenidos e internet en cualquier momento; el 20% destaca la comodidad, la rapidez y facilidad de uso.
En el otro extremo, el 11% critica el precio elevado y un 6% alude a la baja velocidad como principal punto negativo. Sólo el 2% cree que es complicado de utilizar.
Los datos no sólo muestran la consolidación de estos dispositivos y la expansión de su uso, sino que observa una importante intención de compra para 2015. El 29% encuentra el dispositivo “interesante” y el 28% declara desear una mejora que permita acceder a internet y contenidos de una forma cómoda. El 19% dice tener que renovar el dispositivo y el mismo porcentaje de usuarios ve la posibilidad de comprar una en las vacaciones navideñas.
Un llamativo 50% no tiene intención de compra y declara no necesitar una Smart TV (38%), no tener dinero para hacerlo (22%) y no necesitarla (17%).