Pese a lo que se pueda pensar, en el sector de los libros electrónicos aún no está todo dicho. Ni todo escrito. Esta mañana se ha presentado en Madrid Lektu, una nueva plataforma digital que aporta aire fresco al mundo de los ebooks.
Este proyecto nace con la filosofía de ser un punto de encuentro entre los derechos de escritores, editores y lectores y con la vocación de que el comprador es el dueño del contenido que descarga, respetando su presunción de inocencia. “Reconocemos el hecho de que si alguien quiere conseguir contenidos sin pagar, los encontrará. No ponemos vallas al campo”, señalan los creadores de la plataforma. Desde Lektu, aseguran que muchos consumidores de cultura creen justo pagar un precio razonable por un contenido que merezca la pena.
Esta libertad implica que los ejemplares digitales no cuentan con ningún tipo de DRM y que el usuario puede enviarse el ebook que ha adquirido a cualquier dispositivo e incluso prestárselo a otra persona.
En cuanto a las editoriales, Lektu intenta brindar el mayor abanico de posibilidades a las mismas. Así les ofrece distribuir los ebooks de manera gratuita, de pago o usando el pago social. Los editores también pueden optar por añadir una página adicional al ebook con información sobre de licenciamiento personalizada para comprador y hasta marcas de agua digitales, invisibles pero muy útiles para trazar de dónde provienen los ficheros.
Tras Lektu se encuentran cuatro socios fundadores, algunos con experiencia en el ámbito del ecommerce, como Farid Fleifel (CTO en Amazon BuyVip) o David Fernández y otros con una trayectoria más vinculada al mundo editorial, como Alejo Cuervo y Cristina Macía.
Lektu poco a poco va a ampliar su catálogo hasta incluir títulos de todos los géneros. Su vocación es la de ayudar a los pequeños y medianos editores
Para adquirir libros digitales en esta web se puede acceder mediante una cuenta de Facebook o Google. Además, hay que incluir una tarjeta de crédito para poder realizar las compras. Lektu da la posibilidad de almacenarla, eliminarla en cada transacción y hasta permite que se puedan hacer operaciones solo si se añade el CVV (los tres dígitos del dorso) como mecanismo de seguridad. También se puede pagar con una cuenta de Paypal.
Otro de los aspectos que diferencian a esta herramienta de otras plataformas similares es que no exigen ningún tipo de exclusividad. Según indican, su objetivo no es competir con las webs de las editoriales. La iniciativa también tiene la transparencia como pilar. Así, proporcionan a los que publican o editan los libros en la web y a los autores información en la misma sobre cómo se va a repartir el pastel y cómo van sus ingresos.
Lektu solo tiene un mes de vida y mucho camino por recorrer. La plataforma está abierta al feedback y trabajando para incorporar nuevas prestaciones. Así en breve podrían añadir una funcionalidad de pagos dinámicos, por la cual el editor pone un precio base a los libros electrónicos y los lectores pueden subirlo si han quedado satisfechos. Además, se están planteando incorporar elementos de gamificación.
“En el futuro los lectores podrían dar pequeñas recompensas y hasta presumir de que han invitado a una caña a sus autores favoritos. Quizás pongamos alguna función para obtener medallas si se realizan varias de estas acciones. Con estos elementos pretendemos que los lectores vuelvan a la plataforma”, explica Alejo Cuervo, uno de los socios fundadores de Lektu, además de editor y dueño de la librería Gigamesh.
Desde Lektu también están pensando en abrir el camino a la autoedición, aunque esto les llevará más tiempo.
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