Laudato Si, la aceleradora del Vaticano para combatir el cambio climático
Laudato Si se dirige a startups enfocadas en siete desafíos específicos: energía, alimentos, agua, ciudades, potencial humano, conservación y finanzas.
Sí, Singapur no es la única ciudad-Estado que tiene una aceleradora de empresas tecnológicas. El Vaticano también cuenta con la suya, llamada Laudato Si, enfocada a una causa tan actual como hacer frente al cambio climático.
El Laudato Si Startup Challenge ha sido lanzado por dos capitalistas de riesgo, Stephen Forte (director general de Fresco Capital) y Eric Harr (de Imagine Ventures), inspirados por el llamamiento del Papa Francisco a una acción global sobre el cambio climático. Según informa Fast Company, no es necesario que los participantes sean católicos, ya que el programa está abierto a fundadores de startups de todos los orígenes.
Las startups que aborden el cambio climático podrán participar en Laudato Si y recibir 100.000 dólares en fondos semilla y asesoría de expertos a cambio de un 6% u 8% del accionariado. Las empresas participantes recibirán inicialmente cuatro meses de tutoría remota y luego viajarán a Roma para realizar dos meses de trabajo in situ. El programa culminará en un Demo Day en la Academia Pontificia de Ciencias del Vaticano.
La aceleradora se dirige a empresas enfocadas en siete desafíos específicos: energía, alimentos, agua, ciudades hiperpobladas, potencial humano, conservación y finanzas. Las startups no recibirán fondos de la Iglesia Católica, sino que toda la inversión proviene de fuentes privadas. Aunque la aceleradora goza de la bendición y de estrechos vínculos con el Vaticano.
Entre los inversores del Laudato Si Startup Challenge se incluyen los capitalistas de riesgo Ibrahim Al-Husseini y Caitlin Sparks, del FullCycle Energy Fund, y Chade-Meng Tan, del Google Jolly Good Fellow. El objetivo es simple: inspirarse en la encíclica del Papa Laudato Si-Cuidando nuestra casa común y hacer una inversión en empresas con ánimo de lucro cuya tecnología aspira a hacer del mundo un lugar mejor.
“Laudato Si funciona como un programa acelerador típico con inversión de capital, inversión, mentoría y orientación”, explicó el director del programa, Paul Orlando. “Hay un día de demostración al final, pero el quid es que todas las compañías que son seleccionadas encajen de una manera u otra en una serie de grandes problemáticas globales que el Papa identificó en su encíclica”.