Las telecos, en pie de guerra contra la CMT
ASTEL podría decirlo con más palabras pero no de forma más clara: la asociación de Empresas Operadoras y de Servicios de Telecomunicaciones considera que las últimas medidas de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones “no favorecen la competencia”.
La asociación considera que España sigue por detrás de Europa en banda ancha y, según sus estimaciones, “la última medida adoptada por el consejo del órgano regulador” no mejorará la situación.
ASTEL se posiciona así en contra de la decisión de la CMT que elimina la obligación de ofrecer, por parte de Telefónica, un acceso mayorista a sus bucles para banda ancha de alta capacidad (por encima de 30 megas).
La compañía de César Alierta se mostró totalmente disconforme desde un principio con las peticiones de sus competidoras porque, como sus máximos responsables se han encargado de matizar desde que se inició la guerra de la fibra óptica, ellos llegan en las mismas condiciones que las demás operadoras al mercado y no entienden porque tienen que abrir el fruto de una inversión que las otras empresas también podrían realizar.
La fibra óptica, explicaba el CEO de Telefónica, Julio Linares, en Navidades, es “nueva para todos”.
No están de acuerdo las demás operadoras. “A favor de dicha laxitud regulatoria (la última decisión a favor de Telefónica de la CMT) se ha esgrimido el argumento de que una sobreregulación desincentivaría la inversión”, puntualizó un portavoz de la asociación en un comunicado a los medios, para después recordar que a pesar de sus buenos resultados financieros Telefónica ya ha anunciado que reducirá sus inversiones.