Un kernel más moderno de Linux no siempre implica un ahorro de energía
Varios expertos llevaron a cabo pruebas en portátiles Thinkpad de Lenovo que tenían instaladas versiones preliminares de Ubuntu 11.04, y observaron que había aumentado el consumo de energía de los equipos comparado con los resultados obtenidos bajo un kernel anterior.
Algunas hipótesis apuntan a un problema del procesador, ya que en la prueba realizada se detectó que este no podía funcionar ni en el modo de ahorro de energía ni en el de suspensión.
De todas formas, todavía no se ha determinado si es un problema general, que afectaría a cualquier equipo con ese sistema operativo, o sólo se produce con determinados procesadores.
En cualquier caso, los desarrolladores de Ubuntu han calificado la incidencia como un fallo de “Importancia Elevada”, y han anunciado que trataran de corregirlo con una actualización del sistema.
Para ello, primero deberán averiguar los cambios que se registran en el kernel cuando se produce el aumento del consumo de energía.
vINQulos