Las tarjetas gráficas ATI y procesadores móviles ayudan en las cuentas de AMD
AMD ha visto crecer sus ingresos un 40% con respecto al mismo periodo del año anterior gracias en gran medida al buen comportamiento del segmento de gráficos y CPU para portátiles.
El fabricante de procesadores y subsistemas gráficos AMD acaba de anunciar los resultados de su segundo cuarto de año fiscal con unos ingresos de 1.650 millones de dólares, un 40% más que durante el mismo periodo de 2009. Lo beneficios netos se situaron en 83 millones de dólares, ya descontada la operación llevada a cabo con GlobalFoundries que le supuso a AMD un gasto de 120 millones de dólares.
Según la compañía, estas cifras se han obtenido gracias a las fuertes ventas cosechadas en el terreno de los ordenadores portátiles, segmento que durante los últimos meses había estado dominado por su competidor Intel pero que, gracias a la última hornada de chips de AMD, ha cambiado visiblemente. En este sentido, hay que destacar que compañías como HP, Acer, Dell, Toshiba, Lenovo y, más recientemente, Sony, habían llegado a acuerdos con AMD para incorporar estos chips en su oferta de portátiles.
Además, el negocio de tarjetas gráficas ATI también ha experimentado un incremento del 87% con respecto al mismo cuarto del año anterior.
De hecho, en la conferencia de prensa de AMD, Dirk Meyer, CEO de la compañía, admitía que habían tenido problemas con el suministro debido al incremento de la demanda, algo que esperaba rectificar en el futuro.
En el lado negativo, AMD también ha indicado que el negocio de servidores no ha sido todo lo bueno que cabía esperar. La nueva serie de microchips de 8 y 12 núcleos Opteron 6000, con nombre en clave Magny-Cours, no ha respondido a las expectativas creadas por la compañía. No obstante, los futuros chips Ontario, con tecnología de fabricación de 40 nanómetros, “podrían cambiar esta tendencia ya que consideramos que cambiarán las reglas del juego”, aseguraba Meyer. Estos procesadores llegarán a finales de año.