“Las apps no son un fin, sino un medio o parte de un modelo de negocio”
Mobivery es una de las compañías más importantes de España en el desarrollo de apps. Alex Ríos, su CEO, atiende a Silicon News para analizar este próspero mercado.
Cada vez es más frecuente conocer casos de “nomofobia”. De hecho, lo más seguro es que la padezcamos y no nos hayamos querido dar cuenta. “Nomofobia”, que es la abreviatura de “no-mobile-phone phobia”, es el miedo irracional a olvidarnos el móvil y pasar el día sin él. Los smartphones se han convertido en un elemento imprescindible de nuestras vidas, incluso es más probable que nos dejemos la cartera en cualquier lugar antes que este dispositivo.
Con los teléfonos inteligentes han entrado en las vidas de sus propietarios las apps o aplicaciones, los programas informáticos necesarios para que funcionen. Con ellas podamos enviar nuestras fotos, chatear, escribir mails, tweets, actualizar nuestro estado en diferentes redes sociales, llevar un control de nuestras finanzas,… Hay apps para todo, las posibilidades son inimaginables, y a raíz de ello han florecido un gran número de empresas de desarrollo de aplicaciones.
Mobivery, empresa fundada en 2008, se ha consolidado en el desarrollo de soluciones móviles corporativas. Trabaja con más de 100 clientes corporativos y ha desarrollado más de 350 aplicaciones para iOS y Android, logrando superar las 10 millones de descargas. Fue la primera compañía española reconocida en el Apple Store, y ha implantado sus soluciones en empresas como EMT, Dorna Sports (MotoGP), InfoJobs, varios medios de comunicación, Softonic o el IESE.
Además, Mobivery, con 29 empleados repartidos entre Madrid, Barcelona y Sevilla, también se ha consagrado como una referencia en materia de Recursos Humanos. Ha conquistado dos veces consecutivas con el Best Workplaces PYMES España (ediciones de 2011 y 2012), y ha sido galardonada con una Mención de Honor en los Premios Empresa Flexible 2012. Alex Ríos, CEO de Mobivery, ha atendido a Silicon News para hablar de la situación actual de su empresa, los planes de abrir mercado en Estados Unidos, y el estado del mundo de las aplicaciones en la actualidad.
– Hablar de Mobivery es hacerlo de una de las compañías más potentes de España en el desarrollo de apps. ¿Cómo nació la empresa?
Mobivery nació en mayo de 2008, un mes antes de que Steve Jobs presentara el AppStore y el iPhone 3G, el primero que llegó a España. En ese momento intuimos el potencial de esta nueva plataforma y apostamos por ella. Gracias al apoyo de un grupo de inversores pudimos poner en marcha esta aventura que dura hasta hoy.
– ¿Vuestro modelo de negocio en qué se basa?
Nuestra actividad principal son las soluciones móviles corporativas tanto para distribuir en las tiendas de aplicaciones, como para uso interno mejorando sus procesos productivos. Empresas y marcas comerciales recurren a nosotros valorando nuestra experiencia en la conceptualización y diseño, enfocado a la experiencia de usuario en smartphones y tablets, además de la capacidad de hacer frente a los desarrollos más complejos.
– Tenéis tres sedes: Madrid, Barcelona y Sevilla. ¿A qué responde esto?
Los socios que fundamos Mobivery estábamos repartidos en estas tres ciudades, y al inicio se crearon tres equipos de desarrollo, uno por oficina. Desde el año pasado tenemos centralizado el desarrollo en la oficina de Sevilla, una decisión que tomamos para mejorar la calidad del servicio que ofrecemos a nuestros clientes.
– ¿Consideras que para una empresa de vuestras características es necesario un equipo de desarrolladores fijo?
Por nuestra experiencia, sí. Tener un equipo bien coordinado, que mantiene una estructura de trabajo en todos los desarrollos para nosotros es esencial. De esta manera tenemos un control total de todo el proceso y podemos reutilizar componentes de proyectos anteriores.
– ¿Qué tipo de apps son más rentables: las propias o las que hacéis para terceros?
En Mobivery usamos las apps propias como un laboratorio de innovación donde ponemos a prueba nuevos diseños y conceptos que luego trasladamos a nuestros clientes de consultoría. Aunque alguno de estos experimientos ha dado buenos resultados económicos, la empresa está configurada para dar servicio a clientes corporativos.
– ¿En qué medida provienen los ingresos de Mobivery: compra de apps, compra in-app, publicidad, trabajos para terceros,…?
Aproximadamente un 95% proviene de las aplicaciones corporativas y un 5% de las aplicaciones propias.
– Tratáis con clientes muy fuertes como AS, Páginas Amarillas, La Sexta o Infojobs,… ¿Entienden el universo App o debéis batallar mucho con ellos?
Bueno, hay de todo. Sí que es verdad que durante los primeros años fue más complicado. Notamos muchas dificultades a la hora de hacer un plan de negocio en un mercado sin referentes y sobre todo, vender un producto que la gente desconocía. Afortunadamente las empresas cada vez entienden más la necesidad de una buena estrategia de movilidad y van incorporando a sus propios equipos profesionales orientados a movilidad, tanto a nivel de estrategia o marketing, como de programación.
Nombras el caso de InfoJobs y es un ejemplo curioso, porque trabajamos mano a mano con desarrolladores de su equipo, que no tenían mucha formación en apps móviles. No sólo colaboramos para sacar adelante sus apps, sino que les ayudamos a ampliar sus conocimientos en desarrollo y diseño móvil.
– Seguro que muchos clientes os llegan con la idea preconcebida de van a ganar dinero con la App, pero… ¿Se puede ganar dinero con una aplicación?
Nosotros defendemos que las apps no son un fin, sino un medio, un canal, o parte de un modelo de negocio.
Quizás hace unos años era más fácil hacer dinero con las apps, porque la competencia era menor. Pero con más de 2 millones de apps disponibles entre las dos principales tiendas, hay que estar dispuesto a invertir tiempo y dinero y luchar con fuerza si se quieren obtener buenos resultados. Tiene que haber una idea detrás, un objetivo, y mantener la estrategia en el tiempo. Hay que tener en cuenta que con la publicación en la tienda no finaliza el ciclo de vida de la app, sino que sólo es el principio.