Larga vida a la televisión

La televisión no está, ni mucho menos, muerta… y los proveedores del servicio tampoco. Esta es una de las principales conclusiones de un artículo de Alcatel-Lucent publicado en Techzine. Se trata de aprovechar las posibilidades para acercar a los consumidores el contenido personalizado que demandan, con la calidad que los operadores pueden aportar. Con las debidas inversiones, y si es necesario, alianzas, los proveedores pueden mantenerse como el principal distribuidor de vídeos.

El estudio aporta datos claros sobre los dispositivos preferidos para ver vídeo. Según Alcatel-Lucent, la televisión es la favorita a la hora de ver prácticamente todo tipo de contenidos en vídeo, más que ordenadores, que es la segunda opción más elegida, o móviles y tabletas. Sólo se le desbanca en una categoría: la de vídeo corto, donde los otros tipos de dispositivos la arrinconan a la última posición. En todos los demás tipos de contenido (eventos deportivos, noticias o programas, series, películas, realities, documentales), la pequeña pantalla sigue siendo la más elegida.

Acerca de los servicios de streaming OTT, el artículo llama a dejar de considerarlos como una amenaza para los proveedores y operadores tradicionales. Ni consiguen el mismo nivel de beneficios, ni el crecimiento de usuarios  es tan elevado como para que suponga una preocupación manifiesta, ya que calculan que para 2020 llegarán a ser la cuarta parte de los de la televisión.

Aunque la posición de los proveedores en el mercado de contenidos por vídeo seguirá siendo fuerte, hay un llamamiento a la actualización. Como demuestran los datos de suscriptores a servicios de vídeo a demanda, se hace necesario centrarse en dar un doble servicio a los consumidores, que pase tanto por los servicios lineales, que se verán en directo, como por contenidos que puedan ser vistos cuando lo elija el usuario.