La virtualización no ahorra tanta energía como se cree
Las empresas que han cambiado sus sistemas al modo “virtual” gastan chorros y chorros de tinta con notas de prensa en las que aseguran que están haciendo un buen trabajo para el medio ambiente reduciendo huella ecológica y ahorrando en facturas de la luz. Sin embargo, un artículo de Network World pone en duda esta eficiencia.
Los hipervisores, o monitores de máquinas virtuales, contrarrestan, por lo visto, cualquier intento de reducción de energía del sistema operativo obligando a las máquinas a alcanzar el mayor rendimiento posible por vatio que puedan alcanzar. Esto sucede incluso con los sistemas operativos que se entusiasman teniendo “modos ecológicos” y funciones de ahorro de energía inteligente.
Es el hipervisor el que tiene que distribuir los recursos del sistema, y el que monitoriza constantemente las distintas acciones que se realizan, así como los límites administrativos sobre los sistemas operativos y aplicaciones inquilinas. No es una tarea fácil, por lo que las CPUs tienen que trabajar a tiempo completo sin mucho tiempo para poder descansar.
Aún así, la virtualización reduce la necesidad de utilizar múltiples plataformas anticuadas, por lo que aún puede decirse que no es una auténtica pérdida de energía.
vINQulos
The Inquirer UK