Los estadounidenses piensan en distintas alternativas para ahorrar dinero ante el actual contexto de incertidumbre financiera. Un estudio elaborado por New Millennium Research Council (NMRC) afirma que, si la economía empeora en los próximos seis meses, el 39% de los usuarios de telefonía móvil con contrato mensual podría cancelar el servicio o cambiarse a un abono más económico.
El informe revela que unos 60,3 millones de personas podrían pasarse a un servicio prepago o cortar prestaciones adicionales como el acceso a Internet o al correo electrónico.
De hecho, la encuesta realizada a 2.005 personas revela que el 15% de los usuarios ya ha concretado algún tipo de recorte en sus servicios de telefonía móvil en los últimos seis meses.
Por otra parte, el 41% de los usuarios de Internet móvil ha afirmado que es “probable o muy probable” que cancele el servicio en caso de que la situación económica empeore.
El analista Graham Hueber destacó que el 19% de los estadounidenses que, en la actualidad, no cuenta con servicio de telefonía móvil, lo ha cancelado en los últimos seis meses por la pérdida del empleo, el temor al paro, la recesión u otras cuestiones vinculadas a la crisis económica.
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