Por esta razón, Apple podría entrar en el mercado de netbooks, pero no limitando la capacidad de los Mac, sino creando un nuevo diseño a partir de los iPhone que incluya algunas de las funcionalidades de los Mac.
Así mismo,
la firma de Jobs podría seguir beneficiándose de su modelo de tienda AppStore, desde donde ofrecer múltiples programas y aplicaciones para esta nueva generación netbook, quedándose con un porcentaje del software comercializado.
Los analistas también consideran que sería bueno proporcionar a los consumidores alguna forma de sincronizar todos los dispositivos de Apple -PCs, reproductores o teléfonos- para poder intercambiar aplicaciones entre ellos, algo similar a una trastienda cloud computing.
Esta idea de compartición de software ‘en la nube’ hace pensar en el potencial de Apple TV, un producto lanzado en 2007 que se conecta a los televisores para escuchar música, compartir fotos o visualizar películas en alta definición conectando un único cable HDMI.
Fondos para crecer De momento se trata de meras especulaciones, como lo es también el posible lanzamiento de un nuevo modelo de iMac este mismo mes.
Mientras, en la última reunión de accionistas de la firma
se volvió a insistir en que Jobs permanece activo en las decisiones de la compañía a pesar de su baja temporal.
Sin olvidar que -aunque ha perdido cuota de mercado frente a Windows y nuevos smartphones- Apple cuenta aún con capital suficiente para liderar de nuevo el cambio en la informática personal. En el último trimestre del año, creció tanto en ingresos como en beneficios.
La cuestión final es si Tim Cook -encargado de la operativa diaria de Apple- y su equipo podrán mantener la visión de Jobs en su ausencia y si los usuarios seguirán prefiriendo gastar un poco más a cambio de esa innovación. Al menos así ha sido durante 30 años.