La melodía amplificada resonó en la sala de conciertos de York, mientras el director de orquesta, Ambrose Field, hacía uso de una gran variedad de nuevos gestos para organizar los movimientos de los ratones y los triple-clics. Había también música activada por los movimientos de las manos de los músicos, que eran filmados y traducidos musicalmente por las cámaras de los portátiles.
La mayoría de las piezas que se tocaron eran de corte clásico, aunque había una de jazz que se utilizó para medir las posibilidades del sonido digital. Los músicos iban vestidos de negro y utilizaban MacBooks de Apple.
Suponemos que el concierto fue todo un éxito.
Más información aquí.
El sector tecnológico es el más optimista de todos, con unas previsiones de generación de…
En España más de 260.000 personas sufren algún tipo de discapacidad intelectual. Tecnologías como la…
Salesforce presenta Agentforce 2.0, la plataforma digital que transforma el trabajo empresarial con agentes de…
Estas tendencias giran en torno a la resiliencia de los datos, la ciberseguridad, el puesto…
Linda, el innovador asistente de IA desarrollado por Bewe Software, ha sido galardonado como Caso…
Bajo el lema Mindset of Motion, defiende que las personas puedan experimentar el potencial de…